La ministra Gargiulo expuso que la demanda “bruscamente” se duplicó en un año. Sólo por el plan RedSol se asiste a 2.230 familias y, en cuanto a módulos alimentarios, son 2.600 los que se entregaron entre Ushuaia y Río Grande.
La ministra de Desarrollo Social, Paula Gargiulo informó sobre el brusco aumento de la demanda de asistencia, en el marco de un proceso de “degradación” que se está profundizando. Dijo que han tenido que duplicar la asistencia social, que muchas veces complementa la asistencia de los municipios, dado que un plan de cuatro mil pesos no alcanza para las necesidades de una familia que no tiene ningún tipo de ingreso.
“Cada uno desde el lugar que ocupa puede notar la realidad que estamos viviendo. La gobernadora pudo prever las situaciones que nos pueden atravesar”, destacó, ante la previsión presupuestaria que se realizó.
“Nosotros arrancamos con un padrón de mil personas en el programa Redsol y hoy hablamos de 2.230 familias que estamos conteniendo. Esto bruscamente se duplicó en un año, además de sumar módulos de alimentos. En esta última entrega fueron 1.800 módulos alimentarios en Río Grande y 800 en Ushuaia aproximadamente”, dijo.
Esto se suma a la asistencia que brindan las municipalidades. “Hay un programa alimentario que es la tarjeta social, donde también tenemos un padrón de más de mil personas, y tuvimos que pensar en sumar estos módulos alimentarios”, sostuvo, porque con un solo programa no alcanza.
“El programa Redsol es una de las formas de contención para las familias que no tienen posibilidad de ingresos y se han quedado sin trabajo. Hay familias que estaban ya en una situación de degradación y hoy se ha profundizado la situación”, lamentó.
“Este programa se sostiene seis meses y, según la realidad social, se evalúa y se vuelve a otorgar. Era un monto de dos mil pesos y se tomó la decisión de duplicarlo, es decir que se pagan cuatro mil pesos y además hay una bancarización de este programa. El año pasado se destinaron 60 millones solamente para este plan social. También damos otro tipo de ayudas puntuales, como subsidios para sepelios, subsidios de pasajes, según cada situación”, indicó.
Consultada sobre la cantidad total de gente que atiende Desarrollo Social y el costo de la asistencia entre todos los planes, dijo que “es difícil calcular la población que atendemos, porque el ministerio además trabaja con otras situaciones. Por demanda espontánea que se acerca en Río Grande en el día a día, son 50 ó 55 personas como promedio. Los que tienen pensiones nacionales por ahí no llegan a pagar sus alquileres ni a cubrir necesidades básicas. O pagan el alquiler o comen. Hay gente que ha quedado sin empleo y además se atienden casos de vulnerabilidad por alguna situación intrafamiliar”.
Respecto de la superposición de atención entre municipios y provincia, no mostró objeciones: “De parte mía no hay ninguna directiva que impida trabajar articuladamente, desde lo político sabemos cuál es la realidad y con Ushuaia y Tolhuin venimos trabajando. No solamente nos atraviesa la demanda social sino otros casos, y necesitamos herramientas de ambos lados. Nuestros programas no tienen incompatibilidad y, si la municipalidad da una ayuda y nosotros podemos darla también, no hay inconveniente porque hoy la realidad social es que la gente necesita vivir el día a día. Con cuatro mil pesos podemos dar una ayuda a una familia y el municipio se puede acoplar. Capaz se coincide en que uno cubre el alojamiento y otro la comida, porque con cuatro mil pesos no alcanza para que una familia que no tiene ningún tipo de trabajo pueda vivir”, expresó.
“En la entrevista se les pregunta si reciben alguna otra ayuda, hay muchas familias que cobran la asignación universal pero son montos muy bajos, de poco más de mil pesos, que en un supermercado no es nada”, planteó la funcionaria.
Consultada sobre la publicación de un medio nacional que adelanta la posibilidad de que la Nación, para paliar el déficit, traslade la responsabilidad de todos los planes vigentes a las provincias, aclaró que “no son muchos los fondos que destina Nación. Igualmente nos sorprendió esta noticia en los diarios. Venimos transitando momentos de mucha lucha para que la Nación nos envíe fondos. El Consejo Federal de ministros tomó posición para tener mayor participación y que nos den mayores fondos, y cada ministro logra individualmente algunas cuestiones. El plan nacional lo bajamos la mayoría y nosotros hicimos mucho uso de ese plan, para impulsar emprendimientos familiares, dar capacitaciones, y el dinero lo aporta la Nación junto con la provincia”, sostuvo.
“El programa Redsol es netamente con fondos provinciales. La Asignación Universal es por ley y no creo que en este caso se intente trasladar a las provincias. La tarjeta alimentaria tiene un 80% de aportes provinciales y es mínimo el de Nación. Se hizo un ordenamiento porque es un monto muy chico y no se pagaba en tiempo y forma. Además hay un programa de Familias Solidarias destinado a las familias que albergan niños y adolescentes, en lugar de institucionalizar a los chicos”, mencionó.
Lo cierto es que hoy “la gobernadora tiene que sostener todo el esfuerzo, y la realidad es que sería mucho mejor una política que apunte al pleno empleo y no estaríamos hablando de esto”.
“Hoy la familia que se acerca al Ministerio, ya sea en Río Grande, Ushuaia o Tolhuin, tiene una respuesta. En el lugar que estén los trabajadores de este Ministerio, ya sea en Inclusión Social, en Protección, en cualquier área que requiera su intervención, hoy se da una respuesta para resolver el problema de un alquiler, de la falta de un calefactor. Estamos en un contexto difícil y volvemos a vivir lo mismo que en otros momentos de nuestra historia. Es una realidad, pero en el adentro y en el afuera tenemos respuesta”, remarcó.
Respecto de los lugares de atención, recordó que “se inauguró una sede en Río Grande donde estamos todos en un mismo edificio y la gente tiene un lugar para presentarse y resolver una situación particular. En Ushuaia el edificio central se está remodelando. En Protección de Niñez se hizo la remodelación a nuevo, porque había hasta agujeros en la ventana donde se trabajaba con los niños. Con el acompañamiento de Obras Públicas hemos podido dar respuesta a los centros infantiles, a los centros de adultos mayores, con un edificio nuevo en Río Grande y una inversión importantísima en Ushuaia. El Ministerio es muy grande, nos faltan algunas cosas, pero en dos años de gestión se hicieron muchas cosas”, concluyó.
Edición:
Diario Prensa
Noticias de: Ushuaia – Tolhuin – Río grande
y toda Tierra del Fuego.