Encuentran muerto al docente jubilado Daniel Arrieta

EL CRIMEN OCURRIO EN LA LOCALIDAD DE VILLA CARLOS PAZ, PROVINCIA DE CORDOBA, ADONDE EL EX RECTOR DE LA E.P.E.T OLGA BRONZOVICH DE ARKO SE HABIA RADICADO CON SU PAREJA.

Daniel Arrieta y Sandra Buffa, a quien él cariñosamente llamaba “Sandy” se habían mudado desde Ushuaia a Villa Carlos Paz, Córdoba. Ambos eran docentes y él se había jubilado en el 2015. En el último tiempo sus allegados consignaron que la pareja atravesaba por una fuerte crisis.

La principal sospechosa de propinarle un golpe mortal en la nuca al profesor de la materia Dibujo Técnico es otra docente de Tierra del Fuego, Sandra “Sandy” Buffa, quien fue detenida por la Policía de la ciudad serrana, imputada del delito de homicidio calificado por el vínculo .

Una historia de amor y odio entre dos docentes de Tierra del Fuego habría terminado de la peor manera en la hermosa localidad de Villa Carlos Paz, adonde habían decidido radicarse juntos.
Según indicaron los medios de prensa cordobeses, la Policía recibió un llamado teléfonico de una mujer que se identificó como Sandra Buffa, dando cuenta que había encontrado a su esposo tendido en el patio de la vivienda que alquilaban en El Palmar 2.400, entre las calles Playas de Oro y Solares de las Ensenadas. Al arribar el personal policial y sanitario en una ambulancia hallaron a Daniel Arrieta sin signos vitales y sin lesiones aparentes, descubriéndose recién más tarde en la morgue que en la parte posterior de su cabeza existían rastros inequívocos de que se le había propinado un fortísimo golpe con un elemento contundente. En una primera instancia se había creído que Arrieta había sufrido un ACV, determinándose luego que la sangre que manaba de su cabeza era debido a un corte punzante en el cuero cabelludo.
Es de destacar que la mujer, de 47 años de edad, insistió en aclarar que si bien ella estaba en el domicilio no había escuchado ningún sonido proveniente del patio y que se había sorprendido al salir a ese sector de la propiedad y encontrar a Arrieta, de 58 años de edad, exánime sobre el pasto. No obstante sus dichos, la Justicia dispuso que se allanara la vivienda de alquiler que la pareja compartía con dos hijos, encontrándose elementos que terminaron por comprometer a la mujer, entre otros, el elemento presumiblemente utilizado para acabar con la vida del docente jubilado.

En horas de la mañana del martes 16 de julio fue encontrado por su esposa Sandra Buffa, de 47 años, en el patio de una vivienda de alquiler, ubicada sobre El Palmar 2.400, entre las calles Playas de Oro y Solares de las Ensenadas, el cuerpo sin vida de Daniel Arrieta, de 58 años de edad, quien en una primera instancia dijo ignorar lo que le había pasado al docente pero luego fue detenida e imputada del delito de homicidio calificado por el vínculo.

Ante el hallazgo, el fiscal Ricardo Mazzuchi solicitó la detención de Sandra Buffa por la presunta comisión del delito de homicidio calificado por el vínculo, a lo que el juez dio lugar ordenando que la mujer fuera alojada en dependencias del servicio penitenciario, en donde actualmente permanece.

UNA HISTORIA DE AMOR QUE TERMINO MAL

Daniel Arrieta, de 58 años de edad y Sandra Buffa, de 47, a quien él acostumbraba llamar cariñosamente “Sandy” se conocieron hace algunos años atrás y decidieron cambiar su lugar de residencia habitual, mudándose de Ushuaia a Villa Carlos Paz, sin dejar de volver permanentemente a la provincia dado que él continuaba ligado laboralmente como profesor de la Universidad de Tierra del Fuego.
Arrieta se había jubilado en el año 2015 después de prestar servicios como profesor de la materia Dibujo Técnico en la E.P.E.T Nro 1 Olga Bronzovich de Arko, siendo recordado por muchas promociones de estudiantes como “un docente sumamente exigente y de trato un tanto hosco”. Con el correr del tiempo fue designado rector de esa casa educativa, función que prestaba cuando concluyó su trámite jubilatorio.
Sandra Buffa, por su parte, era empleada del comercio Montecarlo Importación en la ciudad de Río Grande, localidad desde la que se mudó para cursar la carrera de docente en la capital fueguina. En esas circunstancias se conoció con Arrieta, con quien compartía la vocación, el deseo de constituir una familia con hijos de uniones anteriores y el amor por los perros.
Si bien la pareja conoció momentos de gran felicidad, sus allegados refieren que en el último año particularmente atravesaban una profunda crisis en su relación.


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