Las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una alianza liderada por milicias kurdas, siguen avanzando este lunes por el barrio de Al Siná, en medio de francotiradores, minas antipersona y la resistencia yihadista, hacia el casco antiguo de Al Raqqa, el bastión sirio del grupo islamista radical Estado Islámico (EI).
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), en tanto, indicó que las FSD controlan ya el 70% de Al Siná.
De persistir en el avance y dominar este distrito, esa fuerza se situaría en los márgenes del casco antiguo de Al Raqqa, en pleno centro de la población, informó la agencia de noticias EFE.
El OSDH, con sede en Londres, destacó que el EI todavía controla las partes de Al Siná adyacentes al casco como las zonas de Owais al Qarni y Al Sahabin Ammar bin Yaser, así como una facultad y una escuela de secundaria.
Hace una semana, las FSD, que disponen del apoyo de los aviones de la coalición internacional liderada por Estados Unidos y de efectivos especiales sobre el terreno, iniciaron su asalto a la ciudad.
El El entorpece el avance con francotiradores y la colocación de minas antipersona, señaló el portavoz de una de las milicias aliadas de las FSD, Mohamed Jaled Shaker, miembro de las Fuerzas de Élite Sirias, quien agregó que sus combatientes se desplegaron ayer por todo el barrio de Al Meshlab, en el extrarradio oriental de la ciudad, tras hacerse con su dominio.
Sin embargo, «todavía hay minas por todas partes (en Al Meshlab), por lo que hay que moverse con cuidado. Ahora se está limpiando el área para poder seguir avanzando», indicó.
Shaker señaló que dos grupos de las Fuerzas de Élite Sirias irrumpieron en Al Siná, que «está considerado como uno de los barrios del interior de Al Raqqa, está muy cerca de la parte antigua».
El asalto a Al Raqqa se está produciendo cuando está a punto de cumplirse el tercer aniversario de la proclamación de un califato por parte del EI – cuya «capital» es Al Raqqa- el 29 de junio de 2014.
Paralelamente, el EI envió refuerzos para aumentar su capacidad de ataque en la ciudad nororiental siria de Deir Ezzor, dividida en barrios bajo el control de los yihadistas y otros en poder del Ejército, informaron hoy activistas.
Unos 800 seguidores del EI, procedentes de Al Raqqa, se desplegaron en Deir Ezzor y sus alrededores en intento del grupo de avanzar y tomar nuevas posiciones en la población, indicó el Observatorio.
La organización de activistas Deir al Zur 24, por su parte, señaló en su cuenta de Telegram que los combatientes del EI que han llegado a la ciudad son más de 1.000 y que proceden de la provincia de Alepo y no de Al Raqqa.
La mayoría de esos combatientes son de nacionalidad chechena y se han desplegado en la zona del cuartel de la Brigada 137, dominada por los efectivos gubernamentales sirios.
El domingo las FSD anunciaron la conquista de un segundo barrio de Al Raqqa, tras duros combates en los que murieron once combatientes del grupo yihadista, además del emir del EI Abu Jatab al Tunisi.