“No estoy de acuerdo con el aborto, pero uno debe aceptar la voluntad de la mayoría”, señaló Sánchez Pósleman

El titular del Sanatorio San Jorge dio cuenta de la reunión que mantuvo la última semana con la senadora Miriam Boyadjian respecto al tratamiento que se da actualmente en la Cámara Alta al proyecto de legalización de la interrupción voluntaria del embarazo.

El titular del Sanatorio San Jorge, Carlos Sánchez Pósleman, dio cuenta de la reunión que mantuvo la última semana con la senadora Miriam Boyadjian respecto al tratamiento que se da actualmente en la Cámara Alta al proyecto de legalización de la interrupción voluntaria del embarazo y confirmó que el encuentro se dio a partir de una solicitud que partió de la propia clínica.
Sánchez Pósleman señaló que el encuentro “fue en respuesta a un anota que dirigimos a los tres senadores por parte de Tierra del Fuego, en relación a la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Sobre todo en el aspecto de la objeción de conciencia institucional que no está prevista y con lo cual no estamos de acuerdo”.
En contacto con la prensa, el dueño de la clínica privada asumió que, “si bien en lo personal no estoy de acuerdo con el aborto, uno debe aceptar la voluntad de la mayoría. El aborto penalizado no ha generado ninguna solución al problema y me parece que hay que tratar el tema bien de fondo, pero no con una ley como la que salió actualmente donde despenalizamos el aborto, pero si no lo hacemos penalizamos”.
“El derecho de la libertad de trabajo que tenemos como institución, de decidir qué servicios prestamos y cuáles no. No obligarme a prestar un servicio que es muy complejo y que no estamos en condiciones de hacerlo ni de acuerdo”, remarcó.
Según Sánchez Pósleman “como clínica tengo la obligación de contratar a un equipo, porque hay que dar apoyo psicológico a esta decisión, y después ver de resolver la práctica si no tuvo éxito el tratamiento farmacológico, realizando una maniobra quirúrgica donde pueden surgir complicaciones. Como institución no estamos de acuerdo en asumir esa responsabilidad porque es algo complejo. No es una práctica de un médico nada más, el ginecólogo es parte del proceso”.
“Mi idea es que esto sea un programa de salud a través de los efectores públicos, donde se desarrolle un programa serio, no proabortivo sino al revés, con prevención del aborto. Tratar de fortalecer a la madre con apoyo económico, psicológico, y si decide hacerse un aborto que sea en una institución pública y no sea penalizada”, puntualizó.
En tal sentido, el empresario agregó que “hay muchos sanatorios disconformes con esto y puede llegar a haber algunos planteos de inconstitucionalidad y es dirimirá en la justicia”.
En otro orden de cosas, el titular del Sanatorio San Jorge fue consultado por la actualidad de la salud en la provincia, sobre lo que sostuvo “vivimos un momento muy complicado, sobre todo los efectores privados, por el aumento de costos por la devaluación del dólar y unas paritarias que se avecinan que requieren un aumento del 25% con claúsula gatillo, que es lo que están pidiendo”.
“Los agentes financiadores han aumentado un 7% hasta ahora, el PAMI promete un aumento del 20% en cuatro cuotas hasta fin de año y la obra social de la provincia hasta ahora no está en condiciones de aumentar. Entonces la cosa se está tornando difícil, sobre todo para el trabajador que sufre la depreciación de su sueldo”, mencionó.
Finalmente, Sánchez Pósleman afirmó la necesidad de “plantear renegociar con OSEF. Cambiaron las autoridades y estábamos dando tiempo para que arranque la nueva gestión, pero dadas las condiciones de las nuevas paritarias vamos a tener que hablar”.
“Algún aumento vamos a tener que recibir a pesar de que el Estado ha manejado los aumentos a través de variables no remunerativas que no impacta en la obra social. Tendremos que hablar y plantearemos el problema”, concluyó.


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