Juicio en Río Grande por intento de homicidio.
Aaron Joel Amarilla, de 19 años, enfrenta un proceso oral y público acusado de haber herido en el cuello a Luciano Monjes, de 22. El fiscal ratificó que el hecho se encuadra en el delito de tentativa de homicidio. La Defensa solicitó una condena mínima por lesiones leves.
El fiscal Jorge López Oribe solicitó al Tribunal de Juicio de Río Grande que se le imponga una condena de 4 años de prisión a Aaron Joel Amarilla, de 19 años de edad, acusado de atacar con una navaja a Luciano Monjes, de 22, en el marco de una pelea registrada a la salida de un boliche céntrico.
Durante su alegato, el representante del Ministerio Público Fiscal sostuvo que los hechos ventilados en las audiencias encuadran en el delito de tentativa de homicidio. En contraposición, la Defensa del imputado, a cargo de los abogados particulares Francisco Giménez y Omar Chávez, pidió que la causa se encuadre en “lesiones leves” y que se le aplique a su representado la pena mínima.
El juicio continuará el viernes 3 de octubre, cuando los jueces convoquen al imputado a expresar sus últimas palabras antes de la lectura del veredicto.
En las audiencias ya declararon una amiga de la víctima que presenció la agresión, la médica que revisó al imputado tras su detención y personal de la División de Delitos Complejos, que aportó imágenes y un video del ataque. También prestaron testimonio un médico y dos policías que llegaron inmediatamente al lugar.
El hecho ocurrió la mañana del 12 de diciembre de 2024, a las 6:50, en la intersección de San Martín y Thorne. Según la investigación, Amarilla atacó a Monjes con una navaja, provocándole un corte en el lateral izquierdo del cuello. Transeúntes que se encontraban en la zona auxiliaron a la víctima y dieron aviso a la Policía y al personal médico.
El acusado fue localizado minutos después en la esquina de Estrada y Moyano, portando un cuchillo. Desde entonces permanece detenido e incomunicado.
Durante el debate se estableció que víctima y acusado se conocían de manera superficial. Ambos ofrecieron versiones opuestas sobre lo ocurrido: Amarilla sostuvo que actuó en defensa propia y que en la refriega tomó el arma propiedad y de manos de Monjes, lo que derivó en la herida. En cambio, el denunciante aseguró que intervino para defender a una chica que supuestamente estaba siendo agredida por Amarilla y que en ese momento fue atacado, mientras allegados al acusado le gritaban “matalo”.
Monjes mostró en la sala la cicatriz que le quedó en el cuello producto de la agresión.
El juicio es llevado adelante por el Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Norte, integrado por los jueces Juan José Varela, Eduardo López y Verónica Marchisio.