Todo se inició en el momento que algunos padres de alumnos de 6tos años de primaria, quienes habían contratado los viajes con la agencia Rumbo 361 comenzaron a comunicarse con algunos de los hoteles del destino y desde los establecimientos les confirmaron que no solo no había reservas a su nombre sino que ni siquiera trabajaban con la agencia en cuestión.
En el mismo sentido los padres de estos alumnos requirieron información al Instituto Fueguino de Turismo donde se les informó que Rumbo 361 no está reconocida ni habilitada para organizar o gestionar viajes de estudios.
Yamil Mustafá, responsable de la empresa, habló con FM Prensa en Ushuaia y FM Aire Libre en Río Grande y aseguró que “hubo un malentendido, nosotros estamos ofreciendo viajes para chicos de primaria para ir a fin de año a Calafate; al mudarse la agencia de Buenos Aires para acá nos quedamos sin legajo”.
“Para nosotros tampoco es un buen momento pero tratamos de buscar la mejor solución. Toda persona que haya comprado acá tiene mi contacto telefónico. A los padres de los chicos se le ofrecieron dos opciones: el reintegro total del dinero o gestionarles el viaje a través de alguna otra agencia que esté habilitada”, informó el titular de la agencia.
Al ser consultado sobre la falta de legajo en el ente de turismo provincial indicó que “la casa matriz de la agencia estaba en Buenos Aires y ahora se mudó a Río Grande, el problema radica en que esa mudanza se está demorando”.
“Hace un mes atrás teníamos el legajo sin ningún inconveniente”, sostuvo Mustafá pese a la documentación de la Subsecretaría de Calidad Turística de Nación que indica que en noviembre de 2016 la agencia había perdido la habilitación correspondiente.
Los damnificados son alumnos de las escuelas Nº 23, Nº 26 y EPEIM de Río Grande quienes gestionaron sus viajes de egresados a El Calafate. Se estima que el costo por alumno va desde los $10 mil a $16 mil.
