Absolvieron a todos los acusados de estafar a la Administración Pública

FINALIZARON ASI 15 AÑOS DE INVESTIGACION DEL CASO GLISUD

El Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Sur, absolvió sin costas a Ángel Gustavo García Casanova, Néstor Sierra, Eduardo Filosa Graciela D`adamo, Francisco Grondona y Enrique Pinto, del delito de defraudación contra la Administración Pública en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público.
En la instancia de últimas palabras que tuvo lugar en Tribunales, el 23 de marzo último, los imputados Eduardo Filosa y Néstor Sierra, decidieron no pronunciar ninguna palabra ante los jueces del Tribunal de Juicio. Sí accedieron a ese beneficio Enrique Pinto, quien sólo agradeció a los magistrados y al representante del Ministerio Público Fiscal, el trato dado a su persona.
Por su parte, Graciela D´adamo le dijo a los jueces que siempre había actuado “dentro de las normas legales”, que no había cometido ningún ilícito y que confiaba en el veredicto de los jueces.
En tanto, Ángel García Casanovas afirmó: “Después de 15 años de proceso judicial, tengo muchas cosas para decir, pero prefiero no repetir lo que dijo mi defensa técnica”, y acto seguido hizo referencia a su inocencia, relatando que “injustamente se ha arruinado mi persona y lo siguen haciendo”.
Durante la etapa de alegatos, el abogado del Fondo Residual, Martín Muñoz, había solicitado al Tribunal de Juicio que condene a los seis imputados a la pena de cuatro años de prisión por el delito de defraudación agravada en perjuicio de la Administración Pública, mientras que el representante del Ministerio Público Fiscal, Eduardo Urquiza, había fundado su alegato en penas que promediaban los dos años de prisión más inhabilitación especial para ejercer cargos públicos mientras dure la condena.
El llamado “Escándalo Glisud”, fue uno de los casos de corrupción más emblemáticos de la historia provincial, y uno de los más dilatados en el tiempo en cuanto a su trámite penal.
El caso juzgó la presunta maniobra delictiva orquestada por integrantes de la empresa Glisud S.A., una firma fantasma creada por dos ancianas indigentes y que supo tener su sede en un prostíbulo de Buenos Aires, para quedarse con créditos hipotecarios, y luego con propiedades, del Fondo Residual del Banco de Tierra del Fuego, durante el mandato del ex Gobernador Carlos Manfredotti y del ex vicegobernador Daniel Gallo.
El juicio se focalizó en un solo hecho acontecido a fines de 2002, cuando el Fondo Residual llamó a concurso público para la adjudicación de los derechos sobre tres créditos del organismo respaldados por garantías hipotecarias.
Glisud se presentó al concurso y lo ganó, con una oferta de 1,4 millones de pesos en bonos defaulteados tomados a valor nominal, que según la acusación fiscal, hizo desechar otra oferta en efectivo y “perjudicó así al Estado provincial”.
Además, el concurso estuvo repleto de irregularidades. No se fijó una base, no se le notificó a los dueños de las propiedades y Glisud no realizó el depósito de garantía del 10% de la oferta.


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