Los dos matrimonios de Ushuaia, conformados por Livio Fernández Alzogaray y Ana Pereyra, y Claudio Pardo y Mirta Gómez Brown, viajaban en un mismo vehículo rumbo a Mendoza.
Chocaron con un colectivo frontalmente el sábado último, en Neuquén. Ana falleció, Livio sigue peleando por su vida luego de haber sido intervenido quirúrgicamente, mientras que Claudio y Mirta sufrieron lesiones que no implican riesgo de muerte. Son propietarios de “La última bita” y “La casa de las mil telas”.
Cuatro conocidos vecinos de la capital fueguina protagonizaron un trágico incidente vehicular en momentos en que transitaban por la Ruta 40, por la provincia de Neuquén, en dirección a Mendoza.
Livio Fernández Alzogaray y su esposa Ana Pereyra emprendieron el viaje junto a Claudio Pardo y Mirta Gómez Brown, unidos por un vínculo de amistad de muchos años.
Según informaron medios neuquinos, la camioneta Jeep Renegade de color oscuro en la que viajaban adelante Livio y Ana y en el asiento posterior Claudio y Mirta, en dirección sur – norte, impactó violentamente contra la puntera frontal izquierda de un colectivo de pasajeros de larga distancia de la empresa Flecha Bus, que circulaba en sentido norte sur, hacia la localidad de San Martín de los Andes. Producido el choque frontal, la SUV quedó por la fuerza del impacto detenida a un costado de la cinta asfáltica, con sus cuatro ocupantes atrapados en el habitáculo deformado.
Fueron otros automovilistas que pasaban por el lugar los primeros en acercarse a los rodados involucrados sin poder prestar demasiada ayuda, ya que fue necesario esperar la llegada de personal bomberil de las ciudades de Zapala y de Junín de los Andes para que con tijeras neumáticas pudieran los agentes sanitarios acceder a quienes se trasladaban en la SUV. Ana Pereyra fue la primera en ser atendida porque evidenciaba encontrarse muy grave, logrando ser extraída de entre los fierros retorcidos con un hilo de vida, pero poco después dejaría de existir. A su lado se encontraba su esposo Livio, semiconsciente y muy dolorido. Luego de que le colocaran un collar de Filadelfia para inmovilizarle la zona cervical de la columna y en tanto los bomberos continuaban cortando hierros y chapas de la carrocería, Livio expresó al personal de salud que experimentaba dolores en las piernas, la cadera y el pecho.
Al fin liberado, Livio fue acomodado en una camilla rígida y trasladado al hospital de Junín de los Andes en una primera instancia, para luego ser derivado al de San Martín de los Andes, por contar éste con mayor complejidad. Claudio Pardo y su esposa Mirta, por su parte, también fueron trasladados en una ambulancia a la ciudad de Junín de los Andes, distante a unos 35 km del siniestro vial, en ambos casos con politraumatismos que no revestían riesgo para sus vidas. También el chofer del micro, cuya identidad no trascendió, manifestaba estar dolorido física y emocionalmente por lo ocurrido, al igual que el compañero de tareas que viajaba en la unidad, sin pasajeros.
Intervino en el lugar también personal de la Policía de Neuquén con asiento en Las Coloradas, agentes sanitarios del Hospital de Las Coloradas y del de Junín de los Andes.
Edición:
Diario Prensa
Noticias de: Ushuaia – Tolhuin – Río grande
y toda Tierra del Fuego.