El hecho se registró en Río Grande.
El día jueves 7 de diciembre se produjo un hecho histórico en cuanto a niveles de alcohol en sangre se refiere: un conductor chocó contra un poste de luz y cuando el personal municipal de la Dirección de Tránsito le hizo soplar la pipeta del alcoholímetro, el dispositivo arrojó nada menos que 3,03. Esta cifra supera cualquier otra que hasta el momento se haya registrado en siniestros y en la provincia, resultando la marca rayana en el coma alcohólico.
Personal policial de la comisaría 3 acudió en un móvil a una zona próxima a la estación aeroportuaria, en donde una camioneta Ford Ranger de color rojo, chapa patente AG 159 NI, había impactado contra la base de una columna para luego despistarse y terminar detenida en medio de un descampado, con su parte frontal muy afectada.
El rodado era conducido por Jose María Cabral, de 44 años de edad, quien resultó increiblemente ileso. Al arribar los inspectores municipales y constatar el resultado positivo de la prueba de alcoholemia, dispusieron el secuestro de la unidad, en tanto los uniformados policiales procedieron a la aprehensión contravencional de Cabral por infracción al Art. 120 de la Ley Provincial Nº 1024.