El abogado Jorge Hernández representa en una causa penal y laboral a tres trabajadores que se desempeñaban como vigiladores privados presuntamente a las órdenes del edil mandato cumplido.
El patrocinante legal intenta determinar el actual domicilio del demandado para notificarlo de las actuaciones en las que se lo acusa de emitir permisos para circular en cuarentena en nombre de una empresa inexistente y de emplear personal de modo irregular.
Sobre la denuncia formulada ante los estrados judiciales por los tres vecinos de la ciudad de Ushuaia que impulsaron una denuncia penal en contra de quien ocupó una banca en el Concejo Deliberante de Ushuaia, por Cambiemos, entre 2015 y 2019, Tomás Bertotto, se refirió el abogado que los representa, Jorge Hernández.
Maximiliano Facundo Romero, Marcelo Alejandro Garay y José Andrés Miño, son querellantes en la causa Nro 4336 que ingresó a la Justicia el 8 de octubre último a las 11.48, en la que se expresa que “desde el mes de noviembre de 2017 desempeñamos tareas laborales como vigiladores para el señor Tomás Bertotto y su empresa Sheriff TDF S.R.L., en condiciones totalmente irregulares. De un día para el otro nos avisaron que a partir del domingo 31 de mayo no teníamos más trabajo, sin que pudiéramos localizar nunca más a nuestro empleador”. Los tres coincidieron también en señalar que en esa situación recibieron de parte de Bertotto, sendos permisos de tránsito por parte de “una empresa fantasma, dado que la firma comercial pudimos determinar posteriormente que no se encuentra registrada legalmente”.
En diálogo con Diario Prensa Libre, Jorge Hernández consignó que “en el momento más duro de la cuarentena, este señor generó permisos de circulación apócrifos en representación de una empresa inexistente que no estaba registrada en el COE ni en ningún lado. Emitió permisos truchos de tránsito a sus empleados, poniéndolos en riesgo a ellos, a toda la ciudad y también a él mismo. Esto que él hizo es un delito contemplado en el Código Penal en el Artículo 205”.
Hernández subrayó el rol de autoridad electa que desempeñó en la sociedad el demandado, lamentando que “en el mismo momento en que Tomás Bertotto ejercía su cargo de concejal levantando la mano en la cámara deliberativa de Ushuaia y protegiendo supuestamente los intereses de los vecinos, tenía al mismo tiempo una empresa fantasma, carente de todo marco legal, que no realizaba aportes por sus empleados ni al Fisco de ninguna manera, con trabajadores en negro de los que se aprovechaba ante la gran necesidad de trabajo que hay. El concejal Bertotto le pagaba una miseria además a sus trabajadores: 18 mil pesos por mes por 12 horas de jornada, los 7 días de la semana. Además el demandado puso de relieve ciertas miserias en su proceder, imperdonables, como hacerle compatir a su personal barbijos y guantes de latex en medio de una pandemia”.
Sobre la presunta extensión de permisos para circular cuando las autoridades sanitarias recomendaban no hacerlo por estar instalada la cuarentena, Hernández sostuvo que “los permisos de circulación que él extendió los firmó de puño y letra, los rubricó él mismo. No hay otras personas intermediarias, no, fue él quien los generó. Por hacer un paralelismo podría decirse que es una situación similar a la del funcionario de Río Grande involucrado en una causa por narcotráfico de público conocimiento, que firmó permisos para transitar que no correspondían”.
Finalmente, el letrado confió en que “Tomás Bertotto sea llamado a comparecer ante la Justicia a la brevedad una vez que se logre determinar cuál es su paradero. No sabemos hoy dónde vive porque no se lo encuentra en el domicilio que había declarado en Ushuaia cuando ejercía su cargo de concejal. Sabemos por trascendidos dónde trabaja pero todavía no tenemos un domicilio en donde notificarlo. Parece que el ex edil tiró una bombita ninja y se esfumó en el aire, pero confiamos en que a la brevedad se pueda establecer en dónde reside actualmente para que responda por sus actos”.
Aunque sin precisarlo, el entrevistado dejó entrever que el edil de Cambiemos mandato cumplido y candidato en las últimas elecciones por el ARI, fue localizado en Buenos Aires, en donde prestaría servicios para el senador de Juntos por el Cambio, Pablo Blanco. En los próximos días el titular de la banca será notificado para que confirme si entre su equipo de asesores se encuentra Tomás Bertotto a fin de configurar un domicilio legal adonde proceder a comunicarle de manera formal que está demandado penalmente.
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