El juez procesó a los Badilla, a Moral y a Guerrero

El juez procesó a los Badilla, a Moral y a Guerrero

Por el doble crimen narcomafioso de Víctor Ezequiel “Wity” Perpetto y Nahuel Luciano Roth.

El titular del Juzgado Nro. 1 del Distrito Judicial Norte sobreseyó además a Luján Bustos y dictó falta de mérito a Carlos Martínez. Todos habían sido detenidos por el doble asesinato de Víctor Ezequiel “Witi” Perpetto y Nahuel Luciano Roth, encontrados sin vida el 8 de octubre último, en un basural del parque industrial.
 El juez procesó a los Badilla, a Moral y a Guerrero
Tres días después del hallazgo de los cadáveres de Roth y Perpetto, Zulma Mencia y Sergio Solís, familiares de los fallecidos, se dirigieron a una casilla consignada como “aguantadero” de Gastón Badilla, para incendiarla. Ambos fueron procesados por “estrago doloso”.

Pocas después de que Víctor Ezequiel Perpetto, apodado “Wity” y Nahuel Luciano Roth fueran encontrados muertos entre la basura por un vecino que ocasionalmente pasaba por el descampado ubicado en el parque industrial, en los fondos del establecimiento mayorista Diarco, en Río Grande, el sábado 8 del corriente mes, el juez que entiende en la causa ordenó la detención de cinco personas: Gastón Badilla, Diego Leonardo Moral, Luján Bustos, Manuel Guerrero y Carlos Martínez. Días más tarde se presentó espontáneamente en Tribunales, el padre de Gastón, el folclorista local Alejandro Badilla. Aunque los primeros cinco mencionados se negaron rotundamente a declarar en las dos oportunidades en que fueron llevados ante el juez Daniel Césari Hernández, para las indagatorias de rigor, otros elementos permitieron esbozar una hipótesis. Material fílmico de cámaras de seguridad y la ocurrencia de otros dos hechos, un incendio y una persecución automovilística a los tiros por la ciudad, le permitieron al magistrado esbozar la hipótesis de que Víctor Perpetto y Nahuel Roth ingresaron a una casilla de la calle 20 de Junio 736, en Río Grande, en donde fueron asesinados por uno o más de quienes allí se encontraban: Gastón Badilla; su padre, Alejandro Badilla y Diego Moral. Posteriormente se les habría unido Manuel Guerrero, quien si bien no está ubicado en el momento de los homicidios en la vivienda, sí se lo relaciona con el traslado de los cuerpos al vehículo en el que serían conducidos al basural. Por esta razón, el juez Césari Hernández decidió procesar por homicidio doblemente agravado por el uso de arma de fuego y alevosía a Badilla padre e hijo y a Diego Moral; en tanto Fernando Manuel Guerrero fue procesado por encubrimiento agravado.

El juez procesó a los Badilla, a Moral y a Guerrero(1)
Victor “Wity” Perpetto fue encontrado muerto en el basural con una tobillera electrónica colocada en el tobillo. Estaba imputado por el delito de lesiones en perjuicio de su ex pareja. También había sido condenado por robo a mano armada en el domicilio de una masajista, en momentos en que la mujer se encontraba en su domicilio con su hija.

El juez dispuso el traslado de Gastón Badilla a la Unidad de Detención Nro. 1 en calidad de detenido comunicado; su padre, debido a que tiene 65 años de edad, permanece todavía en su domicilio mientras se lo somete a evaluaciones médicas que determinen si está en condiciones de afrontar la reclusión en un calabozo y Daniel Moral seguirá preso en una celda de una Comisaría, mientras se evalúa su traslado a la Alcaldía o al anexo de la calle Goleta Florencia, en Ushuaia.
Carlos Martínez, quien conducía uno de los vehículos que protagonizaron una persecución por el Barrio de Chacra II, fue liberado por falta de mérito, pero continuará sujeto a la causa mientras que Luján Bustos fue sobreseída. El juez consideró que la mujer se encontraba en una vivienda sita en los fondos del mismo predio en el que se emplaza la casilla en la que fueron asesinados Perpetto y Roth, por lo que no se habría enterado de lo ocurrido ni tampoco participado en el traslado de los cuerpos al basural.

El juez procesó a los Badilla, a Moral y a Guerrero(1)
Nahuel Luciano Roth también contaba con antecedentes penales, al igual que Víctor Perpetto. Los dos fueron encontrados muertos en un basural, con evidencias de haber sido asesinados a tiros.

Otras dos personas también estaban privadas de la libertad por haber sido consideradas autoras del incendio de la casilla en la que vecinos del lugar sindican que era un “aguantadero” de Gastón Badilla. El ígneo se registró tres días después del doble homicidio e implicó a Zulma Mencia y a Sergio Solís. Este hecho se cree que fue en represalia por las muertes de Perpetto y Roth. El juez Césari Hernández pudo acceder a filmaciones en donde se ve arribar a la calle 28 de Mayo 78, en un automóvil Renault Kwid, a Mencia y a Solís, luego de lo cual la casilla queda envuelta en llamas, registrándose pérdidas totales. Debido a ello los dos sujetos fueron procesados por el delito de estrago doloso con peligro común para terceros y para los bienes de Badilla y de los vecinos lindantes. El magistrado dispuso la detención de Solis, como autor principal del incendio intencional y a Mencia como partícipe necesaria, por lo que la mujer recuperó la libertad inmediatamente de conocida la resolución judicial.


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