Gran expectativa por el juicio al “Comisario WhatsApp”

HIZO UN ACUERDO CON UNA MUJER QUE DEBIA CUSTODIAR Y ELLA “LO MADRUGO” AL ENCONTRARSE A SOLAS Y SIN AVISARLE A NADIE CON SU NOVIO, AL QUE ANTES HABIA DENUNCIADO POR ABUSO SEXUAL Y VIOLENCIA DE GENERO.

Con una buena foja de servicios y estrecho contacto con los vecinos de Río Grande, el oficial Guerrero llega a juicio después de casi dos años de estar en situación de disponibilidad.

Durante la mañana de ayer comenzó el juicio contra el comisario Marcelo Guerrero a raíz de un hecho ocurrido en mayo del año 2017, por el que está imputado.
Al oficial de Policía se le había ordenado, desde el Juzgado del Distrito Judicial Norte, que custodiara la casa de una mujer que tiempo antes había denunciado a su pareja por abuso sexual, delito por el que el sujeto había sido finalmente condenado, pero en goce de libertad hasta que la sentencia quedara firme. Ante el temor de la víctima de ser nuevamente abusada, ella solicitó a la Justicia que se la resguardara, lo que efectivamente se hizo con la disposición de una consigna permanente en su domicilio. Al recibir la orden, el comisario Marcelo Guerrero evaluó la situación y estableció con la mujer una plan de protección coordinado, para que cuando ella estuviera en su casa hubiera un policía en su puerta, el que acudiría cuando regresara a su domicilio, finalizadas sus jornadas laborales. De ese modo el oficial consideró que se podía mantener resguardada a la mujer y aprovechado el servicio de un efectivo policial fuera del horario en el que ella no estaba en su casa, destinándolo a otras funciones requeridas por la sociedad.
Todo marchó bien mientras la mujer cumplió con su parte del trato y avisó por mensaje de texto o llamada telefónica a la dependencia policial que estaba saliendo de su trabajo. Los policías la escoltaban y acompañaban en el exterior de la casa, todo el tiempo, durante toda la noche y hasta el día siguiente cuando la mujer se iba a trabajar. Pero en mayo de 2017 ella incumplió el trato: salió hacia su trabajo, estuvo en contacto telefónico con su ex pareja y se retiró antes de sus tareas laborales para encontrarse con el hombre en su casa. Como no había avisado a la dependencia, como todos los días, no había ningún policía en la puerta. Alertados por la falta de comunicación, se dirigió a la casa de la mujer una patrulla policial, en donde se encontraron con el sujeto, al que otra vez la mujer dijo que la había abusado. Se inició así una causa judicial que terminó por damnificar al comisario Guerrero, quien fue apartado de su cargo, se le retiró su arma reglamentaria y pese al clamor de una gran cantidad de vecinos que lo respaldaron por su trabajo en los barrios de la ciudad, fue mandado a su casa a esperar el juicio.
La Justicia acusó al oficial de haber dispuesto “unilateralmente” una consigna no permanente. Esperaban que él dispusiera a un efectivo policial durante las ocho horas de ausencia de la mujer en su trabajo, parado todos los días en la puerta, frente a un inmueble vacío.
Aunque ahora está acusado de “incumplimiento de los deberes de funcionario público”, muchos consideran que en realidad se lo debería acusar de confiado o inocente. Si no hubiera confiado en la mujer sindicada como victima hoy no estaría su carrera en riesgo ni sus hijos de tener a un padre sin trabajo.

POCO PERSONAL

Durante la primera jornada del juicio oral, Marcelo Guerrero fundamentó su decisión en el hecho de que debido a que contaba con poco personal en la dependencia a su cargo intentó optimizar el servicio a los vecinos, evitando que un hombre estuviera ocho horas todos los días parado frente a una casa en la que no estaba su moradora.
Dijo al respecto que en tres oportunidades elevó notas a sus superiores solicitando que se le otorgue más personal a su jurisdicción, ya que los uniformados que tenía disponible no alcanzaban a cubrir todo el trabajo y que varios de ellos se encontraban de licencia.
También apuntó contra el juez Daniel Césari Hernández, a quien acusó de inducirlo a declarar en su contra: “El me dijo qué es lo que tenía que decir a pesar de que yo no estaba de acuerdo”.
Precisamente la creación de un grupo de WhatsApp, que le mereció numerosas notas en la prensa provincial y nacional, tuvo como objetivo – explicó – “el de optimizar los escasos recursos humanos con los que contaba”.
A partir de las 9 de la mañana de hoy continuará un juicio que está siendo seguido con atención por una gran cantidad de vecinos que le han reconocido a Guerrero su dedicación y esfuerzo en la jurisdicción a su cargo, la de la Comisaría 5ta.


Edición:

Diario Prensa
Noticias de:  Ushuaia – Tolhuin – Río grande
y toda Tierra del Fuego.

https://www.diarioprensa.com.ar