Indignación de antiguo poblador por no poder acceder a la atención médica y los medicamentos

Indignación de antiguo poblador por no poder acceder a la atención médica y los medicamentos

Por la crítica situación de OSEF.

Victor Quiñiempera, deportista de larga trayectoria en el atletismo y empleado municipal jubilado, manifestó su descontento ante las dificultades que atraviesan los afiliados a la obra social del Estado provincial. “Se robaron todo y ahora nosotros pagamos las consecuencias” – indicó.
Indignación de antiguo poblador por no poder acceder a la atención médica y los medicamentos
Victor Onofre Quiñiempera.

“La verdad es que a una altura de la vida en que uno tendría que estar tranquilo y con 70 años de edad, tengo que estar, al igual que muchísima gente que tiene a OSEF como obra social, renegando a más no poder”, comenzó señalando Victor Onofre Quiñiempera, antiguo poblador de Ushuaia.
“Esto no da para más. Esto viene de años y es un desastre. ¡Se robaron todo!. Y lo peor es que los jubilados no podemos hacer mucho porque algunos estamos bien de salud pero otros no. ¿Cómo puede ser que cuando uno va a la farmacia te digan que no atienden con OSEF porque hace meses que no les pagan?. También atenderse con los médicos es un problema. Yo fui a ver a una diabetóloga de la Clínica y me dijo que no trabaja con OSEF porque no le están pagando. Y si no tenía que pagar 10 mil pesos la consulta como particular. ¿Por qué tengo que pagar yo esa cantidad de plata si estuve durante 30 años aportando a la obra social? – indicó Quiñiempera a Diario Prensa Libre, con gran indignación.
“Antes teníamos hasta los pasajes gratis, en la época en que yo ingresé a la Muni en los años 76, 77 y ahora tenemos que andar penando para atender nuestra salud. Gracias a Dios yo puedo caminar y estoy bien físicamente, pero la persona que tiene enfermedades crónicas o graves todavía sufre más la situación. Y esto pasa por la corrupción que hay. A mí me gustaría preguntarle al gobernador, a los legisladores y a los políticos en general: ¿ustedes no piensan que un día también se van a jubilar, ¿ustedes no se enferman?, ¿no van a la farmacia?. ¡Seguro que no!. Con los millones de pesos que ganan no tienen problemas y se pagan todo lo que necesiten al contado, pero no deben olvidarse que fueron elegidos por el pueblo para solucionar los problemas de la gente. Cuando falte un año para las elecciones van a estar todos golpeando las puertas para que los elijan de nuevo. ¿Para qué se postulan? ¡Para salvarse económicamente porque para los demás no hacen nada!”, continuó consignando el entrevistado.
Consultado sobre cómo a su criterio podría resolverse la gravísima crisis que atraviesa la obra social a la que pertenece, el histórico atleta refirió que “acá el gobernador tiene que ponerse las pilas y solucionar este tema de la obra social en forma urgente. Tiene que bajar línea, conseguir los fondos, lo que sea, para regularizar las cosas. Se pierde tiempo al pedo con la mar en coche y mientras tanto los jubilados siguen muriéndose. El jubilado no puede esperar, la solución la tiene que tener para ayer, ni siquiera para hoy. Uno se hace tanta mala sangre pero lo peor que te puede pasar es enfermarte porque si vas a una farmacia, está cortado el servicio y si vas a ver al médico, te dice que OSEF no le paga… estamos para la mierda”.
Por último, el antiguo poblador le pidió a las autoridades que reconsideren el horario de atención de la farmacia de OSEF: “¿Por qué no trabajan doble turno?. Todas las farmacias privadas atienden en doble turno, y la nuestra solo hasta las 2 de la tarde. ¿Cómo es posible? ¿Cuántos empleados estatales hay? ¿Son como 20 mil no? ¿Entonces por qué no nos hacen las cosas más fáciles extendiendo el horario?. Para colmo cuando tantas veces haces cola bajo la lluvia y con frío y por fin llegás al mostrador, te dicen que el medicamento que necesitás no lo tienen, te ponen un sellito y te mandan a que lo busques en otras farmacias, que no te lo venden tampoco porque no les pagan… De terror todo. Quiero que quede claro que no me hago la víctima, yo puedo caminar gracias a Dios, pero ¡imagínense la persona que anda en silla de ruedas o tiene una enfermedad invalidante!. Francamente yo ya no tengo más ganas de ir a votar, porque quienes tendrían que representarnos y evitarnos este padecimiento, solo se preocupan por ellos mismos. ¡Despiértense, señores y preocúpense por nosotros! ¡Y dejen de hacernos pasar por estas situaciones tan deshumanizadas!”.