El fiscal de la causa es Fernando Ballester Bidau.
Se trata de María Elena Nuñez, de 52 años de edad. La causa recayó en el Juzgado de Instrucción Nro 2 a cargo de la magistrada María Cristina Barrionuevo.
Aunque el director del HRU, Dr. Carlos Guglielmi, anunció a la prensa con satisfacción en la puerta del incendiado edificio, la noche del 7 de julio, que “no hubo que lamentar víctimas”, una mujer de 52 años murió en el horario del igneo en la UTI. Ahora la Justicia caratuló el caso como “averiguación de causa de muerte”.
“Causa de averiguación sobre muerte en el Hospital Regional Ushuaia” reza la carátula del expediente judicial que comenzó a sustanciarse en la órbita del Juzgado de Instrucción Nro 2 a cargo de la magistrada María Cristina Barrionuevo.
Gracias a las dudas de la familia de María Elena Nuñez y de la exclusiva difusión del caso por parte de Diario Prensa Libre, el misterio de lo que ocurrió en la habitación Nro 5 de la Unidad de Terapia Intensiva del HRU, se está intentando dilucidar.
Es el fiscal Fernando Ballester Bidau quien tendrá a su cargo la tarea de impulsar las acciones necesarias para determinar si María Elena murió antes de declararse el incendio o durante el mismo, cuando los facultativos procedieron, al igual que hicieron con otros cuatro pacientes más, a desconectarla de la máquina ventilatoria a la que estaba vinculada.
Una fuente confiable de la Justicia provincial contactada por este medio permitió saber que existen suficientes elementos para impulsar la acción penal con el objeto de saber las circunstancias relacionadas con la muerte de María Elena Nuñez y la intervención, dolosa o culposa, que terceras personas pudieran haber tenido en el desenlace.
Mientras las llamas consumían el sector de Salud Mental y se extendían a la sala de Diálisis y un humo negro e irrespirable se expandía por todos los espacios hospitalarios, en Terapia Intensiva los médicos y enfermeros realizaban las tareas de desconexión de las máquinas de asistencia ventilatoria mecánica, de los pacientes que estaban inducidos a coma farmacológico. Intentaban salvarlos del eventual avance del fuego hasta esa área – lo que no ocurrió – para evitar que murieran calcinados o intoxicados por la inhalación del denso humo que producía la goma y lana de vidrio de los entretechos y paredes. También porque la luz general del nosocomio había sido cortada desde el tablero central para evitar accidentes de electrocución, al caer el agua arrojada por los bomberos, al punto de inundarse los pasillos y fundirse los caños de la red de agua aérea por acción del calor.
De los cinco enfermos graves que allí estaban alojados, llegaron a la UTI de la Clínica San Jorge, cuatro, gracias a las tareas de asistencia temporal con un AMBU, o respirador mecánico portátil. María Elena en cambio, nunca llegó. Su cuerpo quedó sobre la cama que ocupaba hasta que el personal lo trasladó a la morgue.
Datos fundamentales
Mientras el personal de salud insiste en que la mujer, madre de un hijo, murió “antes” del incendio y declara como hora del óbito, las 18, sus familiares creen que no fue así y expusieron en la sede policial de la Comisaría 1era., datos que resultan contundentes y que desestiman los dichos de quienes tenían a cargo a la paciente.
En el acta de defunción de la vecina de Ushuaia, material reservado al que Diario Prensa Libre pudo acceder, consta: “Nuñez María Elena ha fallecido de shock refractario y fue asistida por una infección respiratoria por COVID 19, el día 7 de julio del año 2021 a las 18”.
Quien firma el acta de defunción que acompaña el expediente judicial lleva la firma del doctor intensivista Adrián Enrique Tobal, matrícula 98437.
Otro dato que consta en el expediente es que María Elena estaba internada en el nosocomio desde el 26 de junio del corriente año, es decir que transcurrió 13 días internada, durante los cuales fue entubada, conectada a una máquina ventilatoria, se le colocó una sonda vesical y se la dializó.
“En la fecha de su deceso se originó un incendio en el interior del hospital, por cuanto, corresponde determinar las causas relativas a su muerte” – consignan los escritos judiciales que se encuentran apenas en la etapa inicial de la investigación.
Causa paralela
El Juzgado de Instrucción Nro 2 del Distrito Judicial Sur se encuentra también trabajando en otra causa, que lleva el número 34.929 y que se caratuló “Quiroz Siles Nelson sobre incendio”.
En este expediente la magistrada intentará confirmar o no si Nelson Quiroz, quien se encontraba alojado en el sector de Salud Mental del HRU, fue el autor del fuego que luego se extendió al resto del edificio hospitalario, causando pérdidas millonarias, la destrucción de aparatología y de elementos de uso médico y, según concluya la investigación, si terminó también por causar la muerte de María Elena Núñez, durante la realización de las tareas de desconexión, ante un eventual avance de las llamas sobre la UTI.
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