Fue gracias a la donación del Rotary Club Ushuaia, la Cooperadora “De Corazón a Corazón” y Transportes Cruz del Sur.
El jefe del sector del Hospital Regional Ushuaia, Julio Gajardo, expresó su gran satisfacción dado que el elemento era muy necesario para la preservación de la salud del personal que manipula material cadavérico.
Hasta el pasado 21 de febrero, los restos mortales de las personas que fallecían en el nosocomio capitalino debían ser trasladados desde la guardia, el sector de terapia intensiva o sala común, a la morgue, en camillas recubiertas de vieja cuerina descartadas de otras áreas del hospital. Debido a la filtración de fluidos la apelmasada gomaespuma era un campo de cultivo ideal para la proliferación de todo tipo de bacterias peligrosas para quienes realizaban la manipulación de los cadáveres. Así lo manifestó en una entrevista con Diario Prensa Libre, el jefe del área, Julio Gajardo, el año pasado, siendo escuchado su planteo por el generoso corazón de una entidad de bien sin fines de lucro, el Rotary Club distrito Ushuaia; de la Asociación Cooperadora del HRU “De Corazón a Corazón” y de la empresa de transporte Cruz del Sur.
“Para todos los que trabajamos en la morgue del Hospital Regional Ushuaia esta incorporación nos llena de satisfacción porque la camilla de acero inoxidable es una herramienta fundamental para nuestro trabajo, tanto por su funcionalidad como por lo que significa para la salud de cada agente, tal cual expliqué el año pasado en Diario Prensa Libre. Los trabajadores estaban expuestos a un gran riesgo al usar camillas comúnes que acumulaban sustancias potencialmente infectocontagiosas”.
Refiriéndose a los avances que se han registrado en los últimos tiempos en el sector a su cargo, el directivo informó que “desde la nota anterior al día de la fecha tengo que admitir con mucho optimismo que este 2022 está siendo fructifero en materia de refacciones y mejoras. Además del reemplazo de la totalidad del piso en la sala de autopsias por parte del Poder Judicial, se cambiaron las puertas en la parte posterior de la morgue gracias al trabajo del personal de mantenimiento y se adquirió por intermedio de personal de caldera, un nuevo extractor de aire. Esto mejora notablemente la forma de trabajar. También y gracias al Dr Moreyra se incorporó una camilla para el traslado de fallecidos desde el sector de neonatología. Este año se nota un cambio enorme en comparación con el año pasado, con un mayor diálogo y coordinación con la parte de Infraestructura Sanitaria, lo que creo influyó también para que se produjeran tantos avances”.
Consultado acerca de las carencias que todavía existen en el área a su cargo, única en una población de más de 100 mil habitantes, Gajardo planteó: “Como dije antes, si bien el nuevo año nos permitió crecer en equipamiento, no nos relajamos y vamos por más. Necesitamos de manera indispensable una cámara para personas hiperobesas, un carro elevador que nos permita trabajar sin sufrir consecuencias físicas por el esfuerzo que demanda hacer la tarea a pulmón y una camilla más de acero inoxidable”.
Finalmente, Julio Gajardo agradeció muy especialmente “el gran gesto que tuvo la gente del Rotary Club Ushuaia y de la Cooperadora del HRU “De Corazón a Corazón” por la donación de la camilla de acero inoxidable y de la empresa Transportes Cruz del Sur, que generosamente la trasladó desde Buenos Aires hasta el hospital, sin cargo”.
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