En el asentamiento Dos Banderas, en Ushuaia.
Personal bomberil debió ascender 1.500 metros a pie por la inexistencia de calles en el sector en donde está emplazada la casilla. Su morador, Brian Lautaro Adrián, escuchó cuando alguien rociaba con combustible las paredes.
El día sábado 14 de octubre, a las 2.20 de la madrugada estimativamente, personal policial de la Comisaría 5ta e integrantes del Cuartel de Bomberos Zona Norte, fueron alertados debido a que se estaba produciendo en esos momentos un incendio en una zona inaccesible del asentamiento, más precisamente en la denominada Peniel 1, más allá de la garita ubicada en los fondos del sector boscoso.
Los bomberos refirieron que “luego de varios minutos de buscar un acceso a la zona, el personal comenzó el ascenso a pie por más de 1.500 metros, desde el pasaje El Castor, dado que no se cuenta con caminos para el ingreso de las unidades. En el lugar el personal trabajó con herramientas manuales y mochilas forestales para sofocar las brasas de la precaria casilla afectada”.
Los policías, por su parte, dialogaron con el propietario de la casilla, identificado como Brian Lautaro Adrián, quien refirió que en momentos en que se encontraba en el interior de su vivienda pernoctando, pudo oír ruidos en el exterior. Al salir vio que dos de las paredes de la precaria construcción se habían rociado con un líquido aparentemente combustible, originándose un ígneo que él mismo sofocó.
Una vez realizadas las diligencias de constatación, por parte de peritos de la División Policía Científica, Adrián fue trasladado a la dependencia policial a fin de que radicara una denuncia formal.
Cabe destacarse que los bomberos se abocaron a la extinción de lo que se conoce como “incendio de interfase” el que alude a aquellos que se desarrollan en áreas de transición entre zonas urbanas y rurales o forestales, y en donde las estructuras edilicias se entremezclan con la vegetación.