El arribo de uno de los barcos más grandes del mundo se suma a la cifra récord de visitantes – alrededor de 100 mil – que registra el puerto de Ushuaia en lo que va de la temporada de cruceros 2022 – 2023.
La capital fueguina podrá admirar el gigantesco buque en las aguas de la bahía y dar la bienvenida a los 2.500 pasajeros y 1.100 tripulantes que transporta en sus lujosas instalaciones. El megacrucero supera en tamaño y capacidad ampliamente a otros colosos que nos han visitado recientemente.
Ushuaia vive una temporada de cruceros inédita por la cantidad de embarcaciones que llegan desde todas partes del mundo a la bahía y que en su mayoría atracan en el puerto, para deleite de los paseantes que los admiran desde la calle Maipú. También es récord el número de turistas que hasta la fecha han llegado por vía marítima, estimándose que a la fecha oscilan en 100 mil, aunque las expectativas son ambiciosas y se espera que al cierre de la temporada ese número crezca todavía un 50% más.
Ahora le tocó el turno de llegar a la Ciudad más Austral del Mundo al “Princesa Zafiro” o “Sapphire Princess”, un barco que tiene aproximadamente 3 cuadras de largo y media, de ancho. Con sus 290 metros de extensión y 38 de lateral a lateral, la joya de la empresa propietaria Princess Cruises es una pequeña ciudad o pueblo flotante, de 3.500 personas divididas entre las 2.500 que son turistas y 1.100 de la tripulación.
Sin prisa pero sin pausa, el gigante de los mares avanza a una velocidad promedio de 40 kilómetros por hora, previéndose su arribo al puerto de Ushuaia el miércoles 25 de enero próximo, a las 4 de la madrugada.
Los barcos también tienen historias
El Sapphire Princess entró en servicio en el año 2004 como el barco gemelo de Diamond Princess. En ese momento, era uno de los cruceros más grandes del mundo, con una capacidad de 2.670 pasajeros más tripulantes. Fue hecho en Japón por Mitsubishi Heavy Industries, a la par que su hermano Diamond Princess, con quien intercambió nombres durante la construcción. El cambio de nombre se produjo porque un gran incendio arrasó con el Diamond Princess lo que provocó un retraso en su terminación. Como ambos barcos se estaban construyendo al mismo tiempo, el Sapphire asumió el papel de Diamond. Este cambio de nombre ayudó a mantener la fecha de entrega de Diamond Princess a tiempo y mantuvo a Sapphire Princess en los plazos, ya que estaba a punto de completarse antes de lo previsto contractualmente.
El “Princesa Zafiro” carece del «ala» característica en la parte trasera y sobre la popa que sí se puede ver en sus hermanos Golden Princess, Star Princess y Caribbean Princess
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