Milei y militar estadounidense conciertan en Ushuaia acuerdos secretos

Milei y militar estadounidense conciertan en Ushuaia acuerdos secretos

A 2 días de la conmemoración del 42 aniversario de la guerra de Malvinas y de honrar a los caídos en ese suelo usurpado por las fuerzas británicas.

En el avión presidencial el presidente de la nación arribó a la capital fueguina para reunirse con la jefa del Comando Sur de Estados Unidos, Laura Richardson, principal aliado del Reino Unido cuando Argentina intentó recuperar las islas y en las que desde 1982 ambas potencias realizan permanentes ejercicios bélicos. El motivo del encuentro es secreto aunque trascendió que se relaciona con el interés de E.E.U.U en la nueva Base Naval que se está construyendo frente a Ushuaia, la Antártida, la explotación de recursos y el desplazamiento de capitales chinos en la región, como es la construcción del puerto en Río Grande.

Milei y militar estadounidense conciertan en Ushuaia acuerdos secretos

¿Qué hay detrás del viaje de Milei a Tierra del Fuego?. El arribo del presidente de la Nación Argentina a la capital fueguina continúa generando infinidad de interrogantes, sin respuesta. Sobre todo porque viajó solamente para entrevistarse, en instalaciones de la Base Naval Ushuaia, nada menos que con la polémica jefa del Comando Sur del ejército norteamericano, Laura Richardson. La militar ya había sido noticia en todos los medios el año pasado, cuando en una entrevista atribuyó a Estados Unidos la propiedad y facultad para disponer de todos los recursos naturales de los países con los que comparte el continente, incluida Argentina, claro.
El arribo de las dos figuras se produce en medio de un marcado clima de malestar de los ex veteranos de guerra, honrados con actos, bombos y platillos en las tradicionales vigilias del 2 de Abril, pero imbuídos de un profundo sentimiento de ninguneo por parte del máximo referente, Javier Milei, según señalaron.
Según publican medios internacionales, Milei plantó el cumplimiento de su agenda en Buenos Aires y dejó de lado su proclamada austeridad, para abordar el avión presidencial adquirido por el presidente que lo precedió, Alberto Fernández, y puso rumbo al sur para confraternizar con Richardson, en un gesto más de “alineamiento carnal” con la Casa Blanca. Y no lo hizo solo, lo acompañaron su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; el ministro de Defensa, Luis Petri y el jefe de Gabinete, Nicolás Posse. Después del misterioso encuentro, el avión regresará a su asiento regular.
La misma fuente reveló que la militar estadounidense pretende cerrar con el mandatario argentino algunos acuerdos en los que quede claramente establecida la voluntad del Gobierno argentino de romper todo lazo con la potencia China y el compromiso de prioridad absoluta de la fuerza norteamericana en toda explotación de recursos naturales como el litio, petroleo y agua.
Esto tiene que ver con los acuerdos firmados por nuestro país la semana pasada para comprar 24 aviones de guerra a Dinamarca, país aliado de la OTAN de Estados Unidos. El acuerdo, orquestado por el embajador norteamericano en la Argentina, Marc Stanley, incluye un préstamo de 40 millones para equipar las aeronaves. El objetivo parece haber sido abortar un acuerdo similar para comprar ese armamento a China.
La presencia de Richardson es asociada inclusive a los hechos que rodearon reciéntemente al buque Tai An, descubierto con una descomunal carga ilegal de juveniles de merluza negra en sus bodegas y propiedad del empresario chino radicado en Ushuaia, Liu Zhijiang, ya que entre las pretensiones del gobierno estadounidense figuraría la revisión total de los contratos de explotación del recurso en los mares australes.
Otra preocupación de fondo de Estados Unidos es el interés del gobierno provincial en permitir una inversión de China para la construcción de un puerto de aguas profundas en Río Grande, el que sería el más austral del planeta. Y también la instalación de una nueva Base Naval frente a Ushuaia, suficiéntemente dotada para proyectarse estrategicamente a la Antártida, en tiempos de vencimientos de tratados y de avance de los países en el continente blanco.
El interés de Estados Unidos por correr a China de su influencia en el país y la región no es nueva, Richardson visitó el país en dos oportunidades durante la gestión de Alberto Fernández y consiguió reuniones con el entonces ministro de Defensa Jorge Taiana e incluso con la vicepresidente Cristina Kirchner. El alineamiento del gobierno de La Libertad Avanza, y sus aliados del PRO, parece ser claramente más favorable para sus intereses.
Habrá que ver si se pueden conocer cuáles son las verdaderas intenciones de la visitante extranjera y las del propio Gobierno nacional, en el tablero de ajedrez en que se convirtió Tierra del Fuego, y en el que se dirime el juego de fuerzas mayúsculas como lo son Estados Unidos, China y el indeseable vecino, distante a pocos kilómetros de la costa argentina, el Reino Unido.