EN LAS ULTIMAS HORAS FUE ALOJADA EN DEPENDENCIAS POLICIALES LA ESPOSA DEL SEPTUAGENARIO DISCAPACITADO ASESINADO EN SU CASA.
Cuando la empleada doméstica del matrimonio Huenante Maldonado, se disponía a iniciar sus tareas como de costumbre, se horrorizó al encontrar en el interior del domicilio en el que prestaba servicios, en Aristóbulo del Valle 512, al dueño de casa sobre el piso, inerte.
El lunes a alrededor de las 8, Yanina Ricaldes, de 26 años de edad, pegó un grito al ver a su empleador, José Juvenal Huenante Huenante, de 70, tirado en el piso, con una soga oprimiéndole el cuello. Enseguida se le sumó la esposa del septuagenario – María Mercedes Soto Maldonado – quién se mostró sorprendida y dijo haber estado ajena a lo ocurrido, dado que dormía en otra habitación.
Ella fue quien manifestó la posibilidad de que su compañero, con el que llevaba 20 años de convivencia se hubiera ahorcado, señalando que el anciano estaba muy deprimido .
El hecho que tal vez no consideró es que en el lugar no había vigas o lugares apropiados para ello. Además la soga enroscada en el cuello de la víctima no tenía nudo.
Los allegados a la pareja revelaron confidencialmente que los últimos tiempos no habían sido fáciles. Si bien hace dos años atrás José y María Mercedes oficializaron su unión de dos décadas, contrayendo matrimonio, hace unos seis meses el hombre había sufrido un accidente cerebro vascular. La consecuencia del ACV fue una parálisis en la mitad del cuerpo que lo tenía postrado.
Su condición, también lo hacía vulnerable a cualquier acción que lo victimizara… y así fue creciendo la hipótesis del homicidio.
La inexistencia de puertas o ventanas forzadas o de huellas de zapatos que no fueran los de su esposa y más recientes, las de la empleada doméstica, centraron las sospechas en Soto Maldonado.
Pero ¿por qué querría la mujer de 69 años quitarle la vida al hombre con el que pasó los últimos 20 años de su vida?
La investigación trabaja en distintas hipótesis, que van desde la posibilidad de que María Mercedes haya creído que así liberaba a José de sus padecimientos; a una necesidad de terminar con la carga que le pudiera haber representado el tener que atender al discapacitado (aunque eran dos las personas que en distintos horarios lo cuidaban) a un simple interés económico.
Vale destacarse que en la casa del matrimonio se encontraron unos setenta mil pesos chilenos (unos dos mil setecientos argentinos) y otra suma mayor cuyo monto no trascendió, de moneda nacional.
LA AUTOPSIA
Al relevamiento de la escena de los hechos efectuada por personal de la División Policía Científica y de la Comisaría 3era de Ushuaia, se sumó el informe del médico forense. Todo terminó por confirmar que don Huenante no se quitó la vida. Lo hizo otra persona, por estrangulamiento.
Esta novedad decidió a la jueza interviniente, la titular del Juzgado de Instrucción Nro 2, María Cristina Barrionuevo, a instruir a los integrantes de la División Delitos Complejos la total dilucidación del caso. En las últimas horas, los uniformados determinaron que en el marco del macabro suceso, y en función de las pesquisas investigativas preliminares y ciertos detalles sugestivos en la escena del crimen, las sospechas recaerían fuertemente en la esposa del fallecido.
Debido a ello, la magistrada dispuso que María Mercedes Soto Maldonado fuera detenida en carácter de incomunicada, imputada del delito de homicidio.
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