Integrantes de la Comisaría 3era. y de la Comisaría de Género y Familia – 2 mujeres y 2 hombres – resultaron lesionados.
Un incidente vial terminó en una trifulca cuando los uniformados demoraron a un sujeto adulto y a dos muchachos de 17 años de edad que circulaban bajo los efectos del alcohol en horas de la madrugada. Uno de ellos iba con medio cuerpo afuera del habitáculo.
Personal policial de la Comisaría 3era que realizaba recorridas de prevención por la calle Soldado Aguila al 2500 observó a un vehículo Fiat Palio, de color gris, que se desplazaba en la oscuridad de manera temeraria. Al percatarse de ello, el conductor del rodado comenzó a circular a muy baja velocidad mientras uno de los acompañantes iba inclinado hacia el exterior, con todo el torso fuera del habitáculo.
Momentos después se identificó a Abraham Castillo Ortega, de 26 años de edad, como conductor del vehículo y a dos jóvenes menores de edad, de 17 años, como sus acompañantes. Debido a que los tres evidenciaban encontrarse bajo los efectos del alcohol, los policías convocaron a inspectores de la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de Ushuaia, quienes confirmaron poco después con el alcoholímetro que Castillo Ortega registraba 0,68 gramos de alcohol por litro de sangre.
Debido a que el adulto no estaba en situación de hacerse cargo de los dos menores, la Policía dispuso el traslado de los mismos a la sede de la Comisaría de Género y Familia, pero justo cuando iban a ascender al patrullero los adolescentes, llegó al lugar furiosa su abuela, Amalia Peric, de 58 años de edad. La mujer descendió de un Renault Clio de color gris, junto a un niño de 13 años de edad y un hombre, exigiéndoles a viva voz a los uniformados que le entregaran sus nietos. En esas circunstancias se produjo un violento forcejeo entre todos los presentes, terminando demorados los tres menores y la abuela y – aprovechando la conmoción – dados a la fuga velozmente los dos hombres, el conductor del vehículo y el acompañante de Peric.
Posteriormente los tres chicos pudieron ser trasladados a la dependencia policial de la calle Deloqui casi Lasserre mientras que la mujer fue conducida a la guardia del Hospital Regional Ushuaia, para cumplimentar los pasos de rigor previos a su detención en la faz contravencional.
Cuando todo parecía que había regresado a la calma se volvió a producir una nueva gresca en la sede de la Comisaría de la Mujer y la Familia, en donde los dos adolescentes se mostraron exaltados y agresivos. Mientras se procedía a la redacción del acta de restitución de los menores a su padre, se originó otro enfrentamiento físico que arrojó como resultado el de dos mujeres policías y dos hombres de esa dependencia, con lesiones consistentes en esguinces y politraumatismos.
Poco después el hombre se retiró con sus hijos manifestando que se dirigiría a la Fiscalía a realizar una denuncia por considerarse damnificado en la situación.
Consultado uno de los policías afectados refirió que “el trámite se estaba realizando según la rutina pero parece que los jóvenes decidieron aprovecharse del hecho de que en la Comisaría de Género los atendió personal femenino y empezaron a gritar y a insultar. Una de las compañeras tuvo que ser atendida en el hospital con un esguince en un dedo y los demás sufrimos contusiones por golpes de puño y patadas”.
Por lo ocurrido, el área de Asesoría Letrada de la Policía de Tierra del Fuego denunció a los agresores en sede judicial por las lesiones sufridas por los efectivos policiales, adjuntando la constancia del requerimiento de cobertura de la ART.
Anoticiada la Fiscalía de lo ocurrido no dispuso ningún tipo de medida, no así el juez de instrucción de turno, quien ordenó que se notifique a Amalia Peric y a Abrahám Castillo Ortega de derechos y garantías.
El hecho ocurrió el domingo 20 de septiembre a alrededor de las 5.22 de la madrugada.
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