El presidente del INFUETUR mantuvo reuniones con las autoridades, acompañado de un representante del sector privado, con el fin de reclamar que retrocedan con la implementación de vuelos nocturnos, ante problemas operativos del aeropuerto que impedirían el aterrizaje.
A partir de junio la empresa Aerolíneas Argentinas tiene previsto implementar la modificación del horario de los dos vuelos diarios que llegan a Río Grande, uno por la mañana y otro por la tarde, por dos vuelos prácticamente nocturnos, pero desde los gremios aeronáuticos advirtieron que no están dadas las condiciones para el aterrizaje sin asistencia visual, por falta de radioayudas.
El delegado de APA Luis Márquez había adelantado a la prensa que la decisión de los pilotos es “no operar de noche”, con lo cual Río Grande se quedaría sin vuelos, de no mediar un cambio de postura de Aerolíneas. Entre los argumentos, plantearon que no hay maquinaria para limpiar la pista cuando se congela, y tampoco equipos de radioayuda en condiciones.
Consultado sobre el tema, el presidente del INFUETUR Luis Castelli confía en que la empresa dé marcha atrás con la decisión de cambiar los horarios. “Lo que se sabe es que hay una reprogramación y nosotros ya planteamos la inquietud a la compañía días pasados en Buenos Aires, justamente por las dificultades que este tema plantea en todo sentido, desde lo operativo y desde la comodidad de los ciudadanos para trasladarse”, dijo a la prensa.
Indicó que desde Aerolíneas “también alegan cuestiones operativas, de programación de vuelos y veremos hasta dónde podemos avanzar para tratar de restablecer una frecuencia más razonable en materia de horarios”.
La niebla es abundante en la madrugada en la zona norte y ya ha impedido varios aterrizajes, por lo que este punto también fue planteado por Castelli: “Este es un factor que nosotros mencionamos, y yo fui acompañado por un representante del sector privado que corroboró lo que estábamos diciendo. Ellos van a estudiar lo que nosotros propusimos, que en realidad es volver a los horarios anteriores”, dijo del compromiso asumido por la empresa.
“Hay que esperar un poco más para ver cómo evoluciona la decisión de la compañía, nosotros no tenemos más injerencia que la posibilidad de conversar y ponerlo a consideración de las autoridades”, sostuvo el funcionario.
Se le consultó sobre las versiones de que Aerolíneas en cierto modo estaría “despejando” la pista en el horario diurno para la llegada de algunas low cost, cediendo el mercado de la zona norte, pero lo puso en duda: “Yo no sé quién puede pensarlo de esa manera. Si hay razonabilidad en la compañía, no va a estar atentando contra su propia evolución comercial. No sé de dónde puede partir una visión de esa naturaleza, cuando todavía no están operando las low cost. Esperamos que empiecen pronto a operar para darnos más alternativas a los fueguinos para volar hacia el continente, pero es medio descabellado pensar que la misma compañía atenta contra su producto”, concluyó.
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