Fallecimiento del senador nacional Matías Rodríguez.
Las pericias técnicas efectuadas en la vivienda que alquilaba el funcionario, en la calle Del Monte 1930, en el Barrio Casas del Sur, en Ushuaia y las practicadas posteriormente en su cuerpo por el equipo forense, descartaron por completo la presencia de terceras personas en el lugar, quedando demostrado indiciariamente que el disparo que provocó el deceso fue autoinfligido.
Cuando alrededor de las 18.30 del día miércoles 18 de octubre el personal de custodia dio aviso a la Policía de que acababan de encontrar al senador Matías Rodríguez sin vida en el interior de la vivienda que alquilaba en el barrio Casas del Sur, en Ushuaia, comenzó un maratónico operativo que concluiría recién a las 2 de la madrugada aproximadamente. Personal policial de la Comisaria 4ta., efectivos de la División Policía Científica y del área de Investigaciones, además de agentes sanitarios y un perito forense, fueron realizando diversas tareas dentro de un área que se delimitó con consigna policial y conos, para restringir el tránsito vehicular.
En el interior de la vivienda de dos plantas, el cuerpo de Rodríguez y un arma de fuego se presentaban ante los ojos de los peritos en una escena con características indubitables: el senador se había quitado la vida. La realización de pericias precisas posteriores, como la prueba de los tapones de carbono, más efectiva que la del antiguo dermonitrotest, confirmarían que el arma 9 mm de propiedad del funcionario, había sido accionada por él mismo, al quedar en su mano rastros de combustión de pólvora.
Se hicieron también presentes el juez sobre el que recayó el caso, el titular del Juzgado de Instrucción Nro. 3, Federico Vidal; el secretario, integrantes del cuerpo de peritos judiciales y el fiscal Nicolás Arias, a fin de verificar los pormenores del procedimiento, efectuado en presencia de dos testigos especialmente convocados en el vecindario.
Un dato que no es menor, es que junto al cadáver, se halló una especie de esquela de papel, escrita de puño y letra, en donde Rodríguez se refería a la decisión que había tomado. El escrito quedó en resguardo del juez Vidal, quien dispuso además que se proceda a fajar una SUV de color blanco, estacionada frente a la casa; y ordenó que se asigne una custodia policial permanente del inmueble.
El cuerpo de Rodríguez, en tanto, fue trasladado a la morgue del Hospital Regional Ushuaia, en donde en la mañana del día jueves 19 de octubre fue sometido a una autopsia médico legal. Luego de efectuar un reconocimiento visual en el que se habría determinado algún tipo de lesión superficial en la piel del rostro, los forenses hicieron reserva de material biológico para enviarlo a un centro especializado, a fin de determinar si la víctima había ingerido algún tipo de sustancia o alcohol en momentos previos a lesionarse fatalmente.
Durante el examen anatómico del cadáver se complementaron otros estudios efectuados en la escena del hecho el día anterior, para poder determinar el horario del deceso, dato que no trascendió.
De tal manera, se puede asegurar que la sospecha de que en la vivienda de la calle Del Monte 1930 se pudiera haber cometido un homicidio, quedó totalmente descartada, restando sólo esperar el resultado de las pericias toxicológicas para que el juez interviniente cierre la causa bajo la carátula de suicidio.