Recordatorio a Carmen Suazo, antigua pobladora de Ushuaia.
El lunes 16 de junio falleció en Ushuaia, a los 79 años de edad, Carmen Suazo, conocida por todos con el cariñoso apodo de “Negra”. Ella fue una de esas mujeres que llegaron cuando la ciudad era apenas un pequeño pueblo, y que, con trabajo silencioso y cotidiano, ayudaron a tejer la historia y la identidad de la comunidad.
Reconocida por su habilidad como modista, la querida “Negra” dejó su huella en innumerables hogares fueguinos. Muchas vecinas, tanto de aquellas primeras décadas como de generaciones más recientes, conservan alguna prenda confeccionada por sus manos, siempre dispuesta también a colaborar con un cambio de cierre, el ruedo de un pantalón o un consejo amistoso entre hilos y puntadas. Porque su casa no solo era un espacio de trabajo, sino también un lugar de encuentro, de charla franca y risueña, donde se forjaban amistades al ritmo de la máquina de coser.
Amante incondicional de los animales, compartió su hogar con loros, canarios y, especialmente, con sus tres perritos, que hoy la lloran con la misma devoción con la que ella los cuidó.
Carmen compartió su vida durante décadas con Nélson Oyarzún, también antiguo poblador ya fallecido, con quien construyó una familia en la que le dieron inmenso amor a su hijo Cristian. Además de su oficio como una de las primeras modistas de Ushuaia, supo reinventarse incursionando en actividades vinculadas al turismo, sin descuidar jamás a su familia, prodigarle especial cariño a sus nietos y cuidar a sus fieles mascotas.
“Negrita” forma parte de esa inmensa y valiosa legión de mujeres fueguinas luchadoras, emprendedoras, generosas y resilientes, que sin buscar protagonismo, dejaron una huella imborrable en la ciudad que ayudaron a levantar con sus propias manos.
Descansa en paz, Negrita.