La conductora que la embistió está procesada actualmente por el delito de “lesiones graves” pero ahora se analiza el cambio de carátula del caso, por el de “homicidio culposo”.
En julio de 2020, la joven Sofía Brenda Vidolini fue arrollada por un vehículo al mando de Marcela Vargas, en el acceso al barrio Los Cisnes, en Río Grande. Luego de sufrir un daño neurológico grave, fue sometida a diversos tratamientos, pero finalmente dejó de existir.
Sofía Brenda Maria Vidolini fue atropellada en julio de 2020 en la circunvalación norte, a la altura del ingreso al barrio Los Cisnes. Minutos después ingresó a la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Regional Río Grande, en donde se le diagnosticó daño neurológico severo.
Con el correr de los meses la joven mejoró su estado general, aunque una infección intrahospitalaria volvió a agravar su condición. En el interín su madre, Andrea González, apeló a la solidaridad de la comunidad riograndense para costear los gastos del traslado de Sofía a un centro especializado del norte del país, para que mediante ejercicios de rehabilitación su hija pudiera recuperar al menos parte de su calidad de vida. Pese a todos los esfuerzos, la víctima de uno más del alarmante número de siniestros viales que se registran a diario y a toda hora en la provincia, dejó de existir el sábado 29 de enero en Río Grande.
A partir de ahora el juez a cargo del caso, el titular del Juzgado de Instrucción Nro 1, del Distrito Judicial Norte, Daniel Césari Hernández, deberá analizar el cambio de carátula de “lesiones graves” al de “homicidio culposo”.
Desde ocurrido el deceso, trascendió, la familia de la víctima se encuentra impulsando acciones para que la conductora Marcela Vargas, responda por un delito que prevé una pena mayor, fundamentando su postura en que la joven nunca logró recuperarse plénamente después de ser arrollada y que la muerte sobrevino, justamente, a consecuencia de ese mal estado de salud en el que se encontraba.
Su madre, Andrea González, cuando solicitó en 2020 a los vecinos de Río Grande que la ayudaran con la compra de una rifa para que pudiera afrontar económicamente el traslado de su hija al INAREPS, Instituto Nacional de Rehabilitación Psicofísica del Sur, en Mar del Plata, describió así su cuadro: “Sofía sigue internada con estado de conciencia mínima; con una hidrocefalia causada por el traumatismo de cráneo que sufrió en el siniestro vehicular”.
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