Como ya es folclórico, la Justicia lo notificó de Derechos y Garantías, y dejó en libertad.
La damnificada advirtió la sustracción de su tarjeta de crédito tras recibir una alerta bancaria y dio aviso a la Policía. El autor, Darío Sandoval, fue aprehendido con las tarjetas sustraídas y otros elementos robados.
En la madrugada del jueves 3 de julio, una vecina de la ciudad de Río Grande denunció el robo de su billetera del interior de la guantera de su vehículo, que había dejado estacionado y sin llave. El hecho ocurrió en calle Piedrabuena al 600, y fue advertido luego de que la damnificada recibiera un mensaje de WhatsApp del banco, informándole que se había rechazado una compra realizada con una de sus tarjetas.
Alertada por esta notificación, la mujer constató el faltante de su billetera, que contenía tarjetas bancarias y documentación personal. De inmediato, dio aviso a personal policial de la Comisaría Primera, que se presentó en su vivienda alrededor de la 1 de la madrugada.
Iniciado un rastrillaje por la zona, los efectivos detectaron en calle Perito Moreno al 300 a un sujeto que, al notar la presencia policial, intentó huir hacia un terreno baldío, siendo observado descartando varios objetos. Entre ellos se encontraban las tarjetas y documentación sustraídas momentos antes.
El hombre fue identificado como Darío Martín Sandoval, quien además tenía en su poder varias bolsas con verduras congeladas, que habían sido denunciadas como robadas de una firma gastronómica que funciona en el edificio que ocupaba el desaparecido hotel Villa, ubicado en la intersección de San Martín y Espora.
Con orden judicial del Juzgado de Instrucción N°1, se le practicó una requisa personal que arrojó resultado positivo. Sandoval fue notificado de sus derechos y garantías, quedando libre pero vinculado a una causa.
Cabe destacar que el aprehendido posee un extenso historial delictivo, con alrededor de una docena de condenas por delitos contra la propiedad. Cumplió varias penas en el Servicio Penitenciario Provincial y ha sido declarado reincidente en múltiples ocasiones.
Incluso llegó a utilizar durante más de una década un documento falso a nombre de su hermano, con el que logró burlar controles y desenvolverse en la sociedad con una identidad apócrifa.