Una mujer mordió a un policía en medio de un operativo

Viajaba como acompañante en un vehículo conducido por su hermano ebrio, quien chocó a un rodado en cuyo interior dos hombres esperaban el cambio de luces del semáforo para avanzar.

El día sábado 25 de marzo, a las 6 de la mañana estimativamente, personal policial de la Comisaría 2da y efectivos bomberiles del anexo Soto, acudieron a la esquina de las calles Kuanip y Marcos Zar, en donde se acababa de producir un siniestro vial. Al llegar se encontraron con un rodado Renault Duster, conducido por Marcelo Almonacid, de 21 años de edad, a quien acompañaba su hermana, Claudia Almonacid, de 33 años y a un vehículo Citroen C4, al mando de Emanuel González de 22 años de edad a cuyo lado se encontraba Antonio Escobar, de 39 años.
Según se pudo precisar en lo que respecta a la mecánica del hecho y los daños que evidenciaban las dos unidades involucradas, el automotor Citroen C4 se encontraba detenido en espera del cambio de luces del semáforo emplazado en el lugar cuando fue fuertemente embestido en su parte posterior por el vehículo Renault Duster.
Debido a que el comportamiento de los hermanos Almonacid evidenciaba que ambos se encontraban bajo los efectos del alcohol, los policías convocaron a inspectores de la Dirección Municipal de Tránsito, quienes arribaron momentos después munidos del alcoholímetro. Los agentes municipales fueron agredidos con palabras ofensivas por Marcelo Almonacid en forma reiterada cuando la prueba arrojó resultado positivo, enfureciéndose el sujeto aún más cuando los efectivos policiales le comunicaron que se iba a proceder a su aprehensión. En ese momento su hermana Claudia Almonacid se abalanzó sobre los efectivos, clavándole los dientes en el brazo al sargento 1ro. Oscar Rolón, cuando éste intentaba esposar al conductor.
Posteriormente se pudo determinar que además de circular en estado de ebriedad, Marcelo Almonacid tampoco contaba con la documentación para circular, mientras que Emanuel González contaba con todos los papeles en orden.
Finalmente, los dos hermanos Almonacid terminaron en un calabozo: Marcelo por infringir la normativa que prohibe circular con alcohol en sangre, agresión al personal municipal y resistirse a la acción de la autoridad mientras que Claudia, por agredir a un policía e intentar impedir la labor de la autoridad. El vehículo en el que se desplazaban, en tanto, fue incautado y trasladado al playón de secuestros municipal.