TENIA 1,8 GRAMOS DE ALCOHOL EN SANGRE
Un trabajador del volante que se encontraba detenido aguardando el ascenso de pasajeros, en la esquina de las calles Bahía de los Abrigos y Bahía de los Laberintos, en el barrio Rio Pipo, fue imprevistamente embestido por una camioneta a cuyo volante se encontraba un conductor completamente alcoholizado.
A aproximadamente las 4 de la madrugada del domingo último se produjo el siniestro vial que involucró a un automotor Nissan Versa, de color negro, con la inscripción “Remisería La Nueva” en sus laterales, móvil 21, al mando de José Liberto Ramírez, de 52 años de edad, chofer de la agencia mencionada y a una camioneta Toyota Hilux de color blanco, chapa patente OPV 000, conducida por Javier Rómulo Andrade de 47 años de edad.
Según se pudo saber, el remisero se encontraba detenido en la calle Bahía Laberinto al 2800 cuando sorpresivamente fue chocado en el lateral posterior izquierdo de la carrocería de su vehículo.
A consecuencia del fuerte impacto, el remisero sufrió lo que se conoce como “efecto látigo o chicotazo” en el cuello, manifestando intensos dolores en esa zona del cuerpo a los efectivos policiales de la Comisaría 4ta., sita en ese sector de la ciudad que le prestaron los primeros auxilios.
Mientras Ramírez era trasladado en una ambulancia al Hospital Regional Ushuaia, el otro conductor era sometido al test de alcoholemia por personal de la Dirección de Tránsito de la Municipalidad, arrojando la prueba nada menos que 1,8 gramos de alcohol por litro de sangre.
Ante semejante resultado los inspectores dispusieron el incautamiento de la camioneta del beodo, el que fue detenido en carácter de contraventor por infringir el edicto policial que versa sobre ebriedad y otras intoxicaciones.
A Ramírez en tanto, luego de ser examinado en la guardia del nosocomio local, se le diagnosticaron lesiones de carácter leve pero manifestó que no iba a instar penalmente en contra de Andrada, declinando de su derecho de hacerlo según establece el Art. 72 del Código Penal.
No obstante, se inició una causa judicial en la órbita municipal adonde el infractor deberá hacerse cargo de la multa pertinente, independientemente de que no tenga que responder penalmente por sus actos.
QUE DICEN LOS EXPERTOS
Uno de los mayores obstáculos que en Ushuaia, Río Grande y los otros lugares del país en donde rige la “tolerancia cero” a la hora de conducir, en cuanto a beber alcohol y manejar se refiere, es que las personas que manejan se niegan a entender que sus reflejos se verán ineludiblemente afectados si ingieren vino, cerveza, licores o cualquier otro tipo con graduación alcohólica.
A propósito, el director del Same 107, Pablo Jure, explicó el tema consignando los síntomas que causa el alcohol en sangre: «A medida que aumenta la concentración de alcohol en sangre se van produciendo distintos efectos a nivel neurológico; el primero es la desinhibición con solo 0,2 de alcohol en un litro de sangre, en ese momento al desinhibir las situaciones de respeto hacia otras personas es cuando empiezan los problemas».
En este contexto agregó que “a partir de 0,2 y hasta las 0,5 g/s la persona empieza con alteraciones mentales, excitación y euforia. Después el individuo disminuye su capacidad de respuesta, tiene alteraciones en la percepción de la realidad, en los pensamientos, en las distancias e incluso en la caminata. Es cuando también se pueden sufrir problemas a nivel respiratorio y la persona alcoholizada puede llegar a un paro cardiorrespiratorio fatal».
Diario Prensa
Noticias de: Ushuaia – Tolhuin – Río grande
y toda Tierra del Fuego.