SE ENCUENTRA EN GRAVE ESTADO DE SALUD
Gonzalo Ezequiel Araujo, de 28 años de edad, atentó contra su vida el martes 13 de febrero en horas de la madrugada, descerrajándose un tiro en la sien, pero no logró su cometido y se encuentra actualmente internado en gravísimo estado en el sector de terapia intensiva del Hospital Regional Río Grande.
El hombre, de ocupación Policía de la provincia de Tierra del Fuego, se encontraba realizando tareas de guardia en la dependencia de la localidad de Tolhuin, la noche del 12 de febrero, cuando solicitó a sus superiores permiso para retirarse, aduciendo que se encontraba descompuesto.
En las horas subsiguientes, Araujo habría intercambiado una gran cantidad de mensajes por WhatsApp con familiares y con algunos de sus camaradas, anunciándoles que pensaba quitarse la vida, por lo que el Jefe de la Unidad Regional Centro, Comisario Mayor Carlos Manetti, dispuso la realización de un operativo de búsqueda para dar con él.
A aproximadamente las 5 de la madrugada del martes, Araujo fue encontrado en el interior de su vehículo, estacionado en el sector alto del Cerro Jeujupén, por sus familiares, quienes se encontraban acampando en la zona.
El cabo de la Policía presentaba un orificio en la cabeza y yacía inconsciente con la ropa ensangrentada, pero todavía con signos vitales. Sobre el asiento, su arma reglamentaria permitía inferir que había sido accionada por el efectivo, pocos minutos antes.
Inmediatamente una comitiva sanitaria salió en su búsqueda, escoltada por vehículos policiales, para trasladarlo sin pérdida de tiempo al Hospital Regional Río Grande en donde ingresó en estado desesperante.
Sometido a estudios de diagnóstico se pudo determinar que el infortunado policía presenta un proyectil alojado en el cerebro, desconociéndose hasta el momento el grado de afectación, aunque los facultativos dejaron trascender que su situación es sumamente crítica.
Se esperaba la llegada al nosocomio de médicos especialistas a fin de determinar el daño causado por la bala en su recorrido, la posibilidad de extirpársela mediante una cirugía de alta complejidad o, por el contrario, la de no tocarla y evaluar si aún así puede esperarse una mejoría.
Gonzalo Araujo se encontraba atravesando por un proceso de duelo por el reciente fallecimiento de su padre en la provincia de San Luis y también – según dijeron algunos de sus allegados –mencionó tener problemas con su pareja. Ingresó a la institución policial fueguina en 2011 y el año pasado había ascendido a la jerarquía de cabo.
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