LA MUJER DE 50 AÑOS DE EDAD Y UNA NIÑA DE 3, SUFRIERON SEVEROS POLITRAUMATISMOS. OTRA NENA, DE 10 AÑOS, RESULTO AFECTADA EN MENOR MEDIDA.
A aproximadamente las 13 del jueves último, Claudia Vargas cruzaba la calle junto a sus dos hijas de 3 y 10 años de edad, cuando fue impactada violentamente por detrás, por un automóvil conducido por un hombre joven identificado como Moisés Armando Ventura.
El hecho ocurrió en la rotonda de las calles Fuegia Basket y Constitución Fueguina en donde inexplicablemente se lo ve a Ventura – en la filmación de una cámara de seguridad externa – avanzar como si no hubiera estado viendo lo que tenía por delante, presumiéndose que tal vez pudo haber ido viendo el teléfono celular, a opinión de una testigo, (ver aparte).
Hasta el lugar se dirigió personal policial de la Comisaría 2da., al que se sumaron inmediatamente agentes bomberiles del Cuartel Central, quienes constataron que sobre el pavimento yacía la mujer atropellada junto a sus dos hijas, afectadas física y emocionalmente por la situación. Se sumó también a la tarea de contener a las nenas y tratar de ayudar en algún modo, una joven que se encontraba parada en la vereda, quien por poco también estuvo a punto de ser alcanzada por el descontrolado automóvil. Después de impactar con la madre y sus hijas, el sujeto siguió su marcha unos metros más, subió a la vereda con una rueda delantera, pasó muy cerca de la joven testigo y volvió a descender a la calle, deteniéndose un poco más adelante.
El rodado marca Chevrolet Prisma, conducida por Moisés Armando Ventura, de 24 años de edad, fue secuestrado por disposición judicial, trabajando en el lugar por varias horas personal de la División Policía Científica para realizar las pericias de rigor.
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UNA VECINA QUE PRESENCIO EL SINIESTRO VIAL EXPRESO SU INDIGNACION POR LA TARDANZA DEL MOVIL DEL HOSPITAL REGIONAL USHUAIA. “La ambulancia se demoró mucho en llegar”
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Una joven mujer que pidió reserva de su identidad manifestó a Diario Prensa Libre, visiblemente ofuscada, que “esto no puede volver a ocurrir. La señora estuvo un largo rato tirada sobre el pavimento, con la cabeza toda ensangrentada. Las dos nenas lloraban y estaban muy shockeadas. Nadie sabía qué hacer porque el aspecto que tenía la mujer era preocupante. Finalmente, después de mucho esperar, apareció la ambulancia”.Diario Prensa
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