COMISARIA GENERAL DE LA POLICIA DE TIERRA DEL FUEGO, ALEJANDRA GIORDANO.
Desde la Jefatura de la Policía provincial se emitió una circular en la que se indica que el personal policial que haga uso del franco de servicio deberá dejar su arma reglamentaria en la dependencia, resolución que se adoptó tras el suicidio de un uniformado.
“Se venía replanteando la manera de poder implementarlo. Quizás en esta ocasión la repercusión ha sido más llamativa porque el personal se ha manifestado en función de que ocasiona un trastorno para cumplir otro tipo de servicios. Como toda nueva directiva y hasta que se pula, la primera versión que sale suele tener estas reacciones encontradas”, explicó la funcionaria policial en diálogo con la prensa.
Giordano detalló que “la medida se da teniendo en cuenta los antecedentes que registramos en estadísticas respecto de personal que ha tenido inconvenientes con armamento, por la sustracción del mismo y los casos mas relevantes en los que se ha utilizado para tomar algún tipo de determinación respecto de la vida personal, y que se viene trabajando desde otros aspectos en lo institucional en relación a las cuestiones personales del individuo que afectan al servicio y su vida personal”.
Sobre la aplicación de medidas preventivas ante un tipo de problemática que afecta en forma generalizada a la comunidad fueguina, Giordano respondió que “tenemos apoyo psicológico, más allá de los exámenes regulares psicológicos en todo el personal. Si existe alguna cuestión en la que la persona toma una determinación en lo personal, que lamentablemente a veces no podemos prevenir, y pretende atentar contra su vida, el hecho de portar un arma hace que tenga un elemento más a la mano”.
En este sentido, la Comisario Mayor remarcó que “por sobre todas las cosas se trata de priorizar el cuidado del personal”.
En referencia a los cuestionamientos de algunos uniformados que plantean cuestiones de tipo práctico a la hora de aplicar la nueva medida, la comisaria sostuvo que “como toda orden de servicio se debe acomodar y es en lo que estamos trabajando. Es cierto que hubo un descontento por parte del personal que básicamente tiene que ver con la incomodidad que les implica a ellos el trasladarse nuevamente a dependencia para buscar el armamento y cumplir con un servicio adicional pero estamos viendo la manera, entre todos, de poder cumplir con las dos cosas. Estamos buscando el modo de que nos les resulte tan trabajoso hacerse del elemento para cumplir con el servicio y que a al vez en horario franco puedan dejar el arma como opción en la dependencia para evitar que lleguen a manos inapropiadas, como pasó en Río Grande en donde un efectivo sufrió la sustracción de su arma reglamentaria”.
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