Aunque Gastón Badilla se abstuvo de reconocer a quienes lo balearon, las pericias de la División Delitos Complejos de la Policía, realizadas en bases a cámaras de seguridad urbanas, incriminan a los dos imputados en el juicio.
Los peritos policiales se valieron también de la señal que irradiaba la tobillera electrónica de Víctor Perpetto, cuyo cadáver estaba en el baúl del rodado perseguido; en programas de cotejo fisonómico y en declaraciones de vecinos que vieron pasar a los dos vehículos cuyos ocupantes se disparaban unos a otros.
En el juicio que se está realizando en la ciudad de Río Grande y que tiene como imputados a dos muchachos de 26 y 27 años de edad, Maximiliano “Maxi” Perpetto y Leandro Federico “Fede” Soto, la Policía efectuó un aporte que podría ser fundamental para los jueces, a la hora de emitir su veredicto. Esto es particularmente relevante dado que el damnificado en la balacera ocurrida el día 8 de octubre de 2022, alrededor de las 11.30, por las calles de la ciudad del norte provincial, Gastón Badilla, al momento de prestar declaración ante el Tribunal, recurrió a evasivas y terminó por no identificar a quienes lo hirieron.
“Maxi” Perpetto y “Fede” Soto habían sido en su momento ubicados en el escenario de los hechos por el abogado José María Fernández López, defensor de tres de los condenados a prisión perpetua el pasado viernes, en éstos términos: “a las 9:32 minutos del día 8 de octubre de 2022 arriba el Chevrolet a la vivienda de Alejandro Badilla en la calle 20 de Junio”, en alusión al rodado Chevrolet Cobalt de color oscuro en el que habrían estado los imputados. Luego de ocurrida la pelea a golpes y a tiros ya conocida, el letrado agregó que “los dos sujetos – por Perpetto y Soto – estaban afuera de la casa, se mantienen ahí porque estaban haciendo de campana. Ellos estaban armados lo que se comprueba en la posterior persecución, se ponen nerviosos cuando se asoman a la vivienda y escuchan los disparos”.
Por su parte el fiscal Ariel Pinno, consignó que “uno de los imputados sacó su brazo por la ventanilla del vehículo y efectuó diversos disparos con arma de fuego, no pudiendo establecerse con exactitud la cantidad de los mismos, aunque tres de ellos impactaron contra la unidad conducida por Badilla, causándole heridas en una de sus piernas”.
En el asiento del acompañante precisamente, los peritos policiales ubican a “Maxi” Perpetto, en base a la filmación de una cámara de seguridad emplazada en el barrio Chacra II, que registra el momento en que el Chevrolet Cobalt choca de atrás al Volkswagen Gol en el que iba Gastón Badilla con Diego Moral, observándose una mano que apunta hacia Badilla, quien resulta herido en una pierna.
En esa instancia se supone que “Maxi” Perpetto estaba conmocionado por presagiar que su hermano Víctor podría haber fallecido momentos antes en la casilla de la calle 20 de Junio y que tal vez estaba siendo trasladado, vivo o muerto, en el vehículo de Badilla.
Los policías señalan que la filmación muestra parte del rostro y de una prenda de vestir que ubicaría a Maximiliano Perpetto del lado derecho del Chevrolet Cobalt y a Leandro “Fede” Soto, al volante. También el momento en el que ambos descienden del vehículo, al haber impactado una bala proveniente del VW Gol que les reventó un neumático.
La ubicación en el vehículo también permite discriminar las responsabilidades que le pudieran haber cabido a uno y otro joven en el hecho analizado, imputados ambos bajo la figura del delito de “homicidio en grado de tentativa agravado por el uso de arma de fuego”.
Perpetto cuenta con la asistencia defensista del abogado Francisco Ibarra mientras que Leandro Federico Soto, con la de los letrados Lucas Sartori y Yovana Paiva.