LA ESTRATEGIA DEFENSISTA DE FACUNDO OSCAR MANCILLA Y EDUARDO JAVIER ACOSTA, QUE ADUCíA QUE LOS ENJUICIADOS DEBÍAN SER CONSIDERADOS INIMPUTABLES PORQUE “OBRARON BAJO LOS EFECTOS DEL ALCOHOL Y LAS DROGAS Y NO SABíAN LO QUE HACíAN”, FRACASó.
A partir de hoy lunes el juicio por el crimen del jubilado municipal Juan Carlos Lucena ingresa a la etapa de alegatos. Los acusados se encuentran en una comprometida situación.
En la última sesión de debate del juicio oral y público que se está desarrollando en la sede tribunalicia del ex campamento de YPF por el asesinato a sangre fría del sexagenario Juan Carlos Lucena, cometido el 9 de enero del corriente año en uno de los pasillos internos del barrio Textil de Río Grande, se desarticuló la estrategia defensista que desde el primer momento sostuvieron los imputados. Facundo Oscar Mancilla y Eduardo Javier Acosta insistieron en todo momento en destacar que ambos habían consumido alcohol y drogas el día en que ocurrieron los hechos y que debido a ello no tuvieron conciencia en ningún momento de lo que hacían. Reiteraron una y otra vez al concedérseles el uso de la palabra que recién recobraron la lucidez cuando personal policial les golpeó la puerta para allanar el domicilio.
Las manifestaciones no fueron casuales: los enjuiciados pretenden ser eximidos de responsabilidad porque para responder por un acto cometido, la legislación establece que el autor debe entender lo que está haciendo.
Para determinar si los dos sujetos sabían o no lo que hacían cuando asesinaron a cuchillazos con inusitada violencia al indefenso jubilado para robarle la billetera el médico psiquiatra Mariano Ripolli, perito del Poder Judicial, fue contundente al sostener que tanto Acosta como Mancilla, comprendían perfectamente lo que estaban haciendo al momento del hecho.
En la etapa de testimoniales, declararon vecinos, integrantes de la Policía Científica y el médico forense Javier Alberto Fernández, perito del Poder Judicial.
El Tribunal de Juicio está presidido por el juez Ernesto Borrone, con las vocalías de los doctores Juan José Varela y Martín Bramati, en tanto que el Ministerio Público Fiscal es representado por Veronica Marchisio y la defensa de los imputados la asume el defensor ante el Superior Tribunal de Justicia, Gustavo Ariznabarreta.
MUY CERCA DE LA CONDENA
Según describió la fiscal Verónica Marchisio, la víctima Juan Carlos Lucena venía transitando a pie por el pasillo, desde Cambaceres hacía Aeroposta, al tiempo que Acosta caminaba desde el playón del estacionamiento hacía el pasillo, en dirección opuesta a Lucena y el otro imputado Mancilla caminaba algunos metros atrás, en el mismo sentido que Acosta.
“Tras cruzarse con Lucena, Acosta lo sujetó por la espalda, a la altura del cuello, de forma intempestiva y violenta arrojándolo al suelo, logrando de esa manera colocarlo en un claro estado de indefensión”, detalló la Agente Fiscal, sobre el bloqueo que ejercieron sobre la víctima.
En ese ínterin, -continuó- “mientras Acosta lo sujetaba, Mancilla se acercó y le asestó múltiples puñaladas con un arma blanca, provocándole heridas cortantes y penetrantes en el cuerpo de Lucena, lo que derivó en su muerte. Todo fue realizado con la finalidad de apoderarse ilegítimamente de elementos que Lucena llevaba en su poder”.
HOY, LOS ALEGATOS
El Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Norte, dará inicio hoy lunes 7 de octubre, a partir de las 10, la etapa de alegatos, en el juicio seguido a Facundo Oscar Mancilla y Eduardo Javier Acosta, acusados de haber dado muerte a Juan Carlos Lucena a comienzos de este mismo año.
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